MATHS. [ITADEI] (EDITANDO)

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Pov: Deidara

Me subí a su auto sin dudarlo. En total ya era tarde si iba a negarme, el auto por dentro estaba nuevo, aún mantenía ese aroma cuando recién es comprado.

- Itachi-sensei?

- Porfa, dime solo Itachi. Pero solo dime sensei cuando estemos en clase en la escuela.

Asentí volviendo a querer llamarlo por su nombre.

- Está bien, Itachi. ¿Desde cuando, bueno, sabe conducir? Perdone la pregunta solo me dio curiosidad.

- Desde los dieciocho mi papá me enseñó ya que debía empezar a buscar a mi hermanito a la escuela.

- Cuantos años tiene su hermanito?

Pregunte tratando de ser mínimamente interesado.

- Diez. Los cumplió hace muy poco.

Asentí escuchándolo tan atentamente hasta que llegamos a un semáforo en rojo. El celular había sonado por lo que debió ver rápidamente quien era.

Sabía que no podía verlo, pero él estaba observando su perfil perfecto, su vista estaba fija en sus pestañas, jamás había visto unas finas y largas hasta que volteo a verme cosa que disimule.

- Hablando de eso, tengo que ir a buscar a mi hermanito.

- Vayamos. No hay problema.

Fingió, odiaba a los niños sobretodo si eran muy pequeños porque son insoportables. Pero, algo decía que el hermanito de Itachi iba a ser educado y eso que no lo conocía. Unos minutos después el semáforo estuvo en verde y el trayecto se hizo largo y eterno debido a que no sabía de que conversar con su profesor.

Cuando llegaron a la escuela donde su hermanito estudiaba el solo se acercó al auto abriendo la puerta.

- Nii-saan.

Pronunció alegremente el niño, ignorando la presencia del rubio quien estaba en el asiento de al lado.

- Donde quedaron mis modales. Bueno, Dei. Él es mi hermano menor, Sasuke.

Nuevamente me apodo como "Dei." ya estaba gustándome que me diga así, a él nomas le permitiría que lo llame así. Al saber su nombre di mi mejor sonrisa no fingida y lo saludé.

- Hola, Sasuke. Como te dijo, mi nombre es Deidara.

- Hola.

El niño saludó nuevamente. Este si le caía bien, por suerte el hermanito menor de Itachi sabía como comportarse. El trayecto se hizo más divertido debido a la charla más o menos infantil y eso me entretenía. Es un niño encantador.

Cuando llegaron, quedó más o menos impresionado. Donde vivía Itachi era el doble de grande que su casa. Allí estaban sus padres quienes recibieron a Sasuke.

Nos acercamos luego de que Sasuke entrara. Me quedé quieto enfrente de ellos sin saber que hacer, hasta que Itachi con sus modales me presentó.

- Papá, mamá. Él es Deidara, un estudiante de mi salón.

No sabía si saludar o quedarse completamente en silencio debido a que no es normal que los profesores estén con sus alumnos fuera de clase.

- Hola..

Saludo de manera timida a los padres de Itachi. ¿Qué tipo de reacción se tiene al conocer a los padres de su profesor? La verdad no había pasado por una situación tan incomoda como esta.

Al pasar a su casa si se por si era lujosa por fuera por dentro lo era aún mas. Se quedaba observado todo lo que veía de manera detenida. Había varios cuadros y pinturas que era más o menos el paraíso para sus ojos.

- Mis padres no van a tardar en cocinar para el mediodía.

Me aviso cosa que asentí sacando mi celular. Debía avisarle a su mamá que no iría a comer al mediodía, inventaría la excusa de que fue a comer a lo de Sasori en total sabían que hacer los dos cuando pasaban estas situaciones. Al hacerlo guardo nuevamente el celular en su bolsillo.

- Bien, luego del almuerzo podremos quedarnos en la sala.

- Me parece perfecto. Pero ¿Que hará tu hermanito?

- Descuida. No es de molestar y menos no molesta cuando estoy ocupado. Normalmente me pregunta cosas cuando ando desocupado.

Asentí estando tranquilo. Quien sabe qué tipo de reacción tendría su pequeño hermanito si lo ve todos los días con su hermano. De alguna manera u otra Sasuke le había caído espectacular. Lo adoraba, era demasiado tierno.

- Puedes dejar tu mochila en la sala. Así no vas con eso a todos lados.

Ofreció y yo solo asentí dejando ahí mi pertenencia en la esquina para que no moleste. Todo estaba tan bien cuidado y tan limpio que si esta fuese su casa no duraría mucho tiempo limpia y menos no tendrían estos muebles caros. Estaba impresionado.

- Es la primera vez que entro a una casa tan lujosa.

- Jeh, se te nota bastante.

Aquello lo dejó sin palabras. No sabía que era tan obvio.

- Es que.. por la edad que tienes, Itachi. Pensé que vivías solo.

- En eso estoy pensando. Quiero vivir solo, pero no quiero dejar solo a Sasuke.

Comentó para sentarse en el sofá. Yo hice lo mismo no iba a quedarme parado escuchándolo con atencion.

- Mis padres pueden estar presentes ahora. Luego del mediodía se van y no regresan hasta la madrugada, en algunas ocasiones si pero en otras no.

Le prestaba atención, era increíble como la voz tranquila emitía el querer escucharlo hablar todo el día, era demasiado relajante.

- Si yo me voy, Sasuke se quedará solo y no le gustaría la idea de tener a una niñera. Básicamente se conforma conmigo y es por eso que no puedo mudarme.

Concluyó al ver que su hermanito podría escucharlo, cosa que estaba a nada de venir a la sala en donde estábamos a sentarse a esperar por la comida. El pequeño azabache apareció corriendo y se sentó al lado de Itachi.
Tenía muchas ganas de sacarles una foto a los dos, pero sería demasiado.

- Se nota mucho que son muy unidos.

Comenté viendo como Sasuke me observaba con un pequeño pucherito en su carita. Se preguntaba si Itachi también tenía esa misma facción en su cara, no lo sabía, pero si así era también cuando era niño, debía verse adorable. El ambiente estaba tan tranquilo acompañada de la risita de Sasuke que recibía cosquillas por parte de Itachi hasta que fuimos llamados a almorzar.