Para el regreso a casa

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La situación en si era de lo mas frustrante, estaban estancados en lo que parecía ser el ultimo paso para poder descifrar la verdad destres de el viaje dimensional de los humanos, solo daban vueltas una y otra vez al mismo tema.

Ya era la tercera vez que Itachi pasaba su mano por sus oscuros cabellos, suspirando derrotado ante la frustración que sentía, pero sinceramente esto solo le parecía una perdida de tiempo, podrían amarrar a los humanos, ponerlos en una lancha y dejarlos morir de deshidratación.

Pero le interesaba mas el echo de poder saber la verdad tras su aparición, asi que miro los objetos en su  escritorio, un documento con especificación de estos y trato de encontrar una irregularidad.

Soltó sus largos cabellos negros y  se levanto a tomar otra taza de café y abrir de par en par las ventanas de madera, dejando revolotear su cabello junto al viento y mientras se relajaba...algo paso por su mente...

Eso era!!!

¡Estuvo buscando mal todo el tiempo! se acerco a las esperas y miro aquel cielo dentro de estas, ya sea un cielo estrellado o lleno de un radiante sol, desacuerdo a las características, estas tenían un pedazo de algún cristal desconocido y absorbían la magia de todo aquello que tuviera magia, o algo similar a ella.

Después de prueba y error, al fin lo hizo, al fin!!!!

Itachi había podido abrir un agüero de gusano que se mostraba tal y como un espejo, que mostraba tan claro a una aldea, tan felices  y tan llenos de paz, pero lo que le llamo la atención, no fue ni mas menos que aquellas cosas de hierro en sus cabezas.

O como ellos les llamaban, bandanas, y por fin pudo hacerlo, por fin pudo conectar con ese lugar, pudo conectar con un universo paralelo...

¡No podía esperar a contárselo a los demás!

Podía llegar a ser la clave para todo su mundo...

Ahora, por fin podrán estar en paz.



♾♾♾



Eran altas oras de la noche cuando a Naru y a Sasu les llegaron las noticias, mientras que los ninjas no podrían comprender ese sentimiento que se albergaba en sus corazones, no podían entender el porque sentían ese nudo en sus estomago.

-No puedes dormir...

-....

-debe de ser difícil el ver partir a aquellas personas que tanto amate alguna vez, por mínima que sea la capacidad de amor...-La suave voz de Naru acompaño al ninja rubio, este solo pudo suspirar.

-No creo que lo entiendas...

- ha ha ha, llevo vivo muchos años mi querido Naruto, he sentido lo que la soledad te hace- se sentó a lado de Naruto, el cual estaba sentado en una de las sillas del exterior.

-...

-hace años...- comenzó a relatar- fue en mis épocas de juventud, donde apenas era una cría, un cachorro en entrenamiento, el caso es que fuimos a una batalla a unas semanas de la isla, fuimos en cubierto obviamente, pero este joven polluelo, estaba muy emocionado por su primera batalla.

<< llegamos con el amanecer del ultimo día de preparación, y pues estaba tan emocionado que  me tuvieron que noquear para poder dormir, lo cual resulto ya que no desperté hasta el día siguiente, nos preparamos tanto como pudimos, llevamos armas de hierro iguales a las de los humanos, llevamos armas y con nuestras armas...creímos que éramos invencibles.

Los extintos //SASUNARU//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora