𝑨𝒄𝒕𝒐 18: 𝑳𝒂 𝒄𝒐𝒏𝒇𝒆𝒔𝒊𝒐𝒏

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𝑴𝒊𝒆𝒅𝒐𝒔 𝒀 𝑬𝒏𝒕𝒓𝒆𝒈𝒂

Aquella noche mientras dormía, la puerta de mi casa sonó con desespero, me quejé abriendo los ojos pero de pronto un rayo iluminó el cielo seguido de un relámpago estuendoso. Escuché un grito fuera de casa y me levante corriendo para bajar a ver quien era.

Al abrir la puerta me quedé helada al ver a la persona fuera. Tenia raspones en las manos y en en la mejilla, de su boca salía una linea de sangre.

Un relámpago la iluminó su rostro y noté como el agua escurria de su cuerpo

- Jennie - me acerqué a ella abrazandola a mi cuerpo sintiendola completamente empapada - ¿Que te ha pasado?

Ella solamente sollozó mientras se abrazaba a mi cuerpo. Entre encendiendo las luces de la casa y cerre la puerta con seguro. Aun abrazadas caminé por la casa haciendola subir las escaleras para ir hacia mi habitación.

Sin apartarme de ella caminamos hasta el armario y tomé unas prendas para lanzarlas a la cama. Ella se aferro mas a mi cuerpo y lo único que atiné a hacer fue apretarla mas a mi.

- ¿Que te ha pasado Jennie? - pregunté y ella solamente sollozó mas y mas.

Suspiré acaricando su cabello mojado mientras sentia como su llanto iba cesando poco a poco. Ell se aparto de mi y llevó sus manos a mi nuca. Fruncí el ceño mirandola y ella bajó la mirada. La sangre de su boca se habia secado, su mejilla estaba ligeramente hinchada, le tomé de las manos para mirarlos. Estaban un poco hinchado al rededor de su herida.

Suspiré y tomé un mechón de cabello llevandolo atrás viendo que en la corinilla de su cabeza habia una marca que parecía ser dolorosa.

- ¿Fue Kai? - ella giró el rostro evitando mi mirada, habia sido ese hijo de puta que se habia atrevido a tocarla - Te juro que voy a matar a ese hijo de puta.

Cuando la solte para golpear cualquier cosa que hubiera a mi paso ella solamente se lanzó de nuevo a mi cuerpo y me tomó de la nuca para besarme. Abrí los ojos sorprendida y los cerré disfrutando de sus besos aún así tuviera un sabor metálico. Mis manos fueron a su cintura por instinto y las de ella se deslizaron por mis hombros hasta mis senos apretandolos ligeramente.

Jennie se apartó y me miró cortamente para despues llevar sus labios a mi cuello. Jadeé sintiendo ese hormigueo correr por mi cuerpo e instalarse en mi zona mas sensible. Sus besos húmedos hacian un obseno sonido en mi piel y mis manos ardieron queriendo recorrerla.

Pero esto estaba mal, no la habia visto desde hace un mes atrás cuando fui a intentar matar a Kai, ella estaba comprometida con él y no habia escuchado tan siquiera que ella haya cancelado sus planes.

Con toda la fuerza de voluntad que pude reunir la aparté de mi y ella me miró con los ojos llorosos. Bajó la mirada y suspiró para darse vuelta y salir corriendo. Corri detrás de ella viendola tropezar a los pies de la escalera. Cuando intentó ponerse de pie me senté a horcajadas en su abdomen.

- ¿Que te ha pasado? - pregunté tomando sus manos y colocandolas sobre su cabeza mientras las aprisionaba.

Jennie: Déjame ir - dijo cerrando los ojos reteniendo un sollozo - Por favor.

- No, Kim. No te dejare ir hasta que me digas que ha pasado.

Jennie: Siento cosas por ti - soltó tan de repente y fruncí el ceño negando - Yo sé que soy un juego para todos, asi que por lo que mas quieras, dejame ir.

- Lo que mas quiero es a ti - un relampago golpeo fuerte en algun lugar en Beaufort causando que Jennie gritara y la luz se cortara - Debes darte una ducha, no dejaré que te vayas hasta que esto pare.

𝚃𝚞𝚛𝚗 𝚈𝚘𝚞𝚛 𝙵𝚊𝚌𝚎 (𝙹𝚎𝚗𝚗𝚒𝚎 𝚢 𝚝𝚞)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora