Louis necesita un contrato para poder volver a sonar en la música, debido a un año sabatico obligado.
Harry necesita salir de las ataduras de su padre y busca una pareja para poder salir del closet.
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Nuestra historia está un poquito inspirada e...
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En mi última presentación pedí en mis camerinos que sonara la música de Louis junto con la que solíamos escuchar en casa, quizá no fueron muchos los conciertos en los que me acompañó, pero me acostumbré muy rápido a tenerlo cerca de mí antes de algún concierto.
Me faltaba mi amuleto de la suerte.
Escuchaba la gente cantando sus canciones, eso me calmaba los nervios.
Niall entró al camerino acompañado de mi madre, y Gemma tomada de la mano de mi pequeña Sam, me levanté rápido sin importar que me estaban arreglando el cabello.
Mi familia estaba presente, solo me faltaba Louis.
—¡Princesa! ¡Que hermosa sorpresa! —cargué con entusiasmo a mi pequeña.
Ella me abrazó y se quedó recargada en mi hombro.
—Suerte esta noche, cariño. Niall ya nos contó que Louis no está por su trabajo, no te preocupes, sé que amaría estar aquí. —mamá se acercó y dejó un beso en mi mejilla, solo pude sentir el nudo en mi garganta, mirando a Niall con agradecimiento, sabía que me preguntarían por él y lo solucionó antes de que no supiera que decir.
—Estaremos en el palco —Gemma solo sobó mi espalda y me dio su mejor sonrisa.
Mis reinas y mi princesa se despidieron de mi entre besos y abrazos.
—Gracias por traerlas, Niall, y por ocultar lo de Louis. —confesé.
—No es nada, estaban algo preocupadas por las estúpidas notas, y quería que supieran que estabas bien, no del todo, pero vas mejorando.
—Niall —lo detuve cuando comenzó a caminar hacia la puerta del camerino—yo sé que mi aprobación no la necesitas, sé lo mucho que amas a Gemma, y no se diga de Sam, quiero que sepas que, si ella decide salir contigo, yo claramente los apoyaré.
—No digas que no necesitaba de tu permiso, no quiero arruinar nuestra amistad, pero me alegra saber que confías plenamente en mí. Créeme que no querré otra cosa más que hacerlas feliz.
—Pero no olvides que, si me entero de cualquier estupidez que haga, te romperé era nariz irlandesa.
Lo oí reírse cuando entraron los asistentes llevando mi traje especial que había pedido, un atuendo azul similar a los ojos de Louis.
El chaleco era azul brilloso, los pantalones acampanados amplios eran mejor de lo que en los bocetos había imaginado.
Me lo probé y me sentí estremecer.
Ya estaba todo listo para iniciar el concierto, antes de entrar al escenario, Niall me tomó del brazo y me deseo suerte agregando lo que mi corazón anhelaba escuchar.
—Hazlo especial, como sabes hacerlo. La noche es tuya, Hazz. —chocamos los puños. —y otra cosa, hablé con Liam, sé que no debería decirte esto antes de tu show, pero aún no consigo que me diga donde esta Louis, al menos lo que te puedo asegurar es que no está con Vincent.
