❀ 𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝒄𝒖𝒂𝒕𝒓𝒐 ❀

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Mamá, con solo decir tu nombre
¿Por qué me duele el corazón de esta forma?
Me lo has dado todo, no puedes darme mucho más
Pero lo sientes por eso
¿Qué puedo darte a cambio?
Mamá, mí querida madre

Jin (BTS) - ❝Mother❞

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Después de esa extraña situación, pagaron la cuenta individual. Reki pidió varias rebanadas de pasteles que estaban en el mostrador para llevar. Estaba seguro que a las gemelas y Koyomi les iba a gustar.

—¿Aun tienes hambre? -—Pregunto Shindo después de ver todo lo que pidió para llevar reki.

—Ah no. Esto no es para mí. Son para mi madre y mis hermanas.

El mayor solo asintió y no dijo nada más. Mientras tanto Tadashi ya había salido del establecimiento y estaba esperando en el auto.

Se ofrecieron en llevar a reki hasta su casa y aun que se negó en un principio después termino aceptando.

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Ahora estar estacionados frente a la casa de los Kyan. Reki se baja del auto y hace una pequeña reverencia.

—Gracias por haberme traído a casa. —Sonrió— Maneja con cuidado Tadashi. Cuídese señor Shindo.

—Nos veremos en unos días Reki...—sonrió con algo de malicia.

Reki no supo que contestar a eso y solo iba a sentir cuando escucho una voz a unos cuantos pasos de él.

—¿Reki...?

Volteo a ver solo para toparse con su hermana, Koyomi. Que por lo que ve regresaba de sus entrenamientos de beisbol. La menor se acerco a él y miro dentro del carro. Reconoció la cara del azabache pero no de la persona que estaba en la parte trasera del auto.

—¡Koyomi! Has regresado temprano de tus entrenamientos. — se le notaba algo nervioso.

—No. En realidad, eres tu el que llega tarde. — con una mirada afila, observa al peliazul. — (No me da buena espina) Reki, ¿Quiénes son? ¿Te están molestando?

Al escuchar esto Shindo no pudo evitar soltar una pequeña risa, lo que hizo que la niña frunciera el ceño. La niña tomo su bate e iba acercándose con toda la intención de romper el vidrio del carro hasta que reki la detuvo. 

—-¡no! Koyomi, ten. —le entregó la caja donde venían los pasteles.— Ve adentro con mamá.

—¿Pero...?

—Anda. Anda. Las gemelas tendrán hambre, ve y dales un pedazo de pastel.— Comenzó a empujarla.

—-tks ¡ya voy! ¡No me empujes! —-contesto molesta.

Reki solo ve como su hermana abrió la puerta de golpe. Esta vez la había hecho enojar, bueno ya verá la forma de compensarlo.

—-Me disculpo por mi hermana. A veces ella parece ser la mayor y no yo. -— Se rio torpemente.

—No te preocupes.

-—Buenos, nos vemos. -—se despidió con la mano y comenzó a caminar hacia su casa.

Antes de entrar, vio como el auto arranco y desapareció en la distancia.

Entro en la casa y fue primero a saludar en altar que tenían de su abuela. Para después ir a la cocina donde las gemelas tenían un escándalo por que ya querían comer el pastel.

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