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-¿De que hablas? -soltó una risa mirando a la niña

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-¿De que hablas? -soltó una risa mirando a la niña.

Ciertamente la niña tenía un aire parecido a el. Bueno, ahora que se fijaba si se parecían, el cabello blanco con aires de rubio y brillante, sus mejillas llenitas recordándole a si mismo cuando era pequeño, algo extraño era que la niña parecía tener el mismo color de ojos que el.

Sintió un escalofrío. El parecido daba miedo.

-Tienes razón. -susurró. Y se llama
Rosé.-susurro para si mismo.

-Esto es genial Yuta, ¡podemos hacer algo grande esto! Imagínate el artículo. el hombre extendió sus manos.- "Nakamoto Yuta rescata niña y luego la invita a sesión de foto al darse cuenta del enorme parecido."

-No la rescate, no estaba en peligro.

-Ya sabes a lo que me refiero Nakamoto. -rodó los ojos. Necesitamos contactar a sus padres, esto será bueno. Regresar a Corea no fue tan malo, ¿eh?

Yuta rodó los ojos asintiendo.

-Supongo. -dijo lentamente mirando a la niña.

Minutos después su representante ya contaba con el número del padre de la niña que había sido facilitado por la niñera. Yuta frunció el ceño, ¿quien da el número de otra persona sin su autorización? Negó para luego notar cómo la niña lloraba abrazando el gato.

-No quiero...

Yuta por primera vez en lo que la había visto pudo ver a una verdadera niña de seis años, o vio como se suponía que debían ser, ¿no? Él no sabía nada. Se acercó lentamente.

-¿Que pasa?

-Debe dejar el gato, a su papá no le gustan los gatos. Siempre es lo mismo. -dijo susurrando esto último.

-No tiene comida y tendrá frío. -se quejó aún llorando.

-Rosé, tal vez consiga algunos ratones para la cena, no debes preocuparte.

-Esta muy chiquito, los ratones se lo van a comer a el.

Yuta no sabe porque pero sintió la necesidad de intervenir. Ya no queria ver a la niña llorar.

-Oye. -se abajo a su altura. -¿Que tal si lo adoptó para que no tengas que preocuparte?

La pequeña lo miró con un puchero que le recordó a alguien pero no pudo hacer memoria junto en el momento.

-¿Le vas a dar comida?

-Claro. -asintió.

-¿Y si tiene frío lo vas a acobijar?

-Si. -sonrió.

-¿Y le darás leche? No de soja.-dijo haciendo una mueca que hizo reír a Yuta.

-No de soja. -prometió.

𝑅𝑜𝑠𝑒́ (yumark) EN EDICIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora