Niña Bonita (TERMINADA)

¿Quieres ser mi...?

Poché;

Aún estaba procesando todo.

-Esto es el inicio de lo que quiero para nuestras vidas, María José- y se acercó a mi.

-Calle, a qué te refieres...- dije en un hilo de voz. Estaba bastante nerviosa.

-A lo largo de mi vida, nunca he encontrado las palabras correctas para expresarme. Siempre antes de hablar, lo pensaba mil veces. Con todos siempre tengo dudas, hasta que llegaste tú y cada vez que te miro a los ojos, lo único que quiero es decirte lo que siento. Gracias a ti, soy más valiente, más segura y más feliz, eres mi lugar, mi tranquilidad y eres la paz que deseo tener a mi lado siempre. Y aunque, ya estamos juntas y amo lo que sea que tenemos, quiero que esto tenga un nombre.

De uno de sus bolsillos sacó una cajita pequeña de terciopelo.

Quedé helada.

-Da.. Daniela, yo... Soy muy jóven y aún no me pue... Puedo casa..- tartamudeé, pero Calle me interrumpió

-Oh no, tranquila. No te voy a pedir matrimonio, o al menos no por ahora- sonrió

-¿Y qué es eso?- señalé la caja

-Esto... Es un anillo, pero no de matrimonio. Más bien, es como una muestra del amor que siento por ti, para que cada vez que lo veas me recuerdes a mí y a lo mucho que te amo. Y también, es para pedirte que... Poché, ¿Quieres ser...- se sonrojó tanto que creí que iba a estallar.

-ser...- dije para que terminara la oración.

-¿Quieres ser mi novia?-me miró de una manera tan profunda, al punto de que sus pupilas se dilataron.

-Dile que sii- gritaron al fondo Pau y Mario quienes estaban de testigos de todo lo que estaba sucediendo.

Quedé un momento con la boca abierta, procesando lo que había dicho.

-Si mi amor, claro que quiero- me lancé a sus brazos y la besé.

Todo era perfecto, esa tarde Calle me pidió que iniciaramos nuestra historia. Y ahora, ella era mi novia.

Y eso me encantaba.

Mario y Pau fueron hacia nosotras para abrazarnos, y tomarnos algunas fotos.

Eran los mejores amigos que podíamos tener.

-Yo siempre supe que esto pasaría- dijo Pau mientras tomaba un pedazo de la pizza que estaba en la mesa de aquella terraza.

-Si, claro- respondió Mario -Tú eres una despistada, seguro pensaste que ni siquiera podrían ser amigas

-Oh, claro que sí. Cuando Poché me dijo que iría a Misi até los cabos, fui como su cupido en secreto. Y siempre que pude las dejé a solas- dijo bastante segura, mientras le daba otro mordisco a su pizza de pepperoni.

Todos soltamos una gran carcajada.

-No es cierto- dije -Te enteraste que estábamos juntas cuando Daniela me persiguió y desaparecimos ese día, si no fuera por eso, seguro aún ni siquiera lo habrías notado

Realmente Paula, era la persona más despistada del mundo. Aunque en los momentos serios era bastante madura, siempre hacía reír a la gente con sus ocurrencias.

Ese día, fue uno de los mejores de mi vida. Mi amor me pidió algo que venía pensando desde hace unos días y de la manera más hermosa posible. Calle siempre lograba hacer cada momento perfecto.

Y nuestros acompañantes (Pau y Mario), sin duda hacían el momento aún más especial con sus chistes, anécdotas y peleas.

Ellos se fueron a buscar algunos dulces en la tienda del hotel, mientras Calle y yo fuimos a caminar a la playa.

Tomadas de la mano, sin miedo.

-Oye- me dijo

-¿Qué pasó chiqui?- la miré cariñosa.

-Creo que cuando llegue a Bogotá le hablaré a mis padres sobre...

-...tu orientación sexual- terminé

-Si. La verdad, creo que ya quiero que me conozcan completamente en ese sentido, solo... Solo espero que me apoyen, tengo un poco de miedo- frunció su ceño un poco triste

-Mi amor, todo estará bien. Voy a hacerlo también, no pienso seguir escondiendo lo que siento- le sonreí bastante segura

-Espera... También le dirás a tu papá?- abrió sus ojos un poco sorprendida

-Si, y a Vale también- asentí

-Eres muy valiente- respondió

-No más que tú- y le di un beso.

Cerca del mar, justo cuando el sol estaba dando su último rayo de luz.

Ese día, publiqué en mi Instagram una foto con Calle. No tenía miedo de lo que pensara la gente, no respondí ningún comentario, solo la publiqué muy feliz.

Lugar feliz (cerquita a ti).