I need you, Matt

Capítulo XXV

Petrificada.

Por unos segundos no pestañé, no tragué saliva. Ni siquiera respiré.

Matthew notó mi cara de poker. Y me di cuenta de que estaba más nervioso que antes.

— Perdón, n...no se en que estaba pensando. Debes pensar que fui muy rápido. Perdón, de verdad

Comencé a reirme, hasta ahora no se por qué me reía. Tal vez hayan sido mis nervios, porque realmente estaba muy nerviosa.

Matthew me miraba asombrado, no entendía el motivo de mi risa.

— Perdona, no se por qué me río. Pero sí

— Qué? —dijo confundido

— Yo tambien pienso que es muy temprano, ya que hace un poco mas de una semana que nos conocemos—dije e hizo una mueca— pero igual. Mi respuesta es sí. Quiero salir contigo, Matt

Sus ojos se abrieron como dos platos gigantes— Wow Rose, no sabes cuanto me alegra esto —sonrió y me abrazó.

Feliz le devolví el abrazo, hasta que el sonido de llaves arruinaron el lindo momento. Nos separamos rápidamente.

La puerta se abre y aparece mi madre con Kincade. Cade sube corriendo sin nisiquiera saludar, desesperado por jugar con sus videojuegos. Mamá me mira a mi y luego a Matthew, sorprendida ya que nunca traía a nadie a casa, menos todavía chicos.

— Salí antes hoy, Rose —dijo mientras me saludaba— Soy la mamá de Rose, y tú eres? —le preguntó a Matt.

— Matthew, el no... —raspé mi garganta para interrumpirlo, lo cual me miró y dijo nervioso— no...nuevo amigo de Rose

En serio ya le iba a decir a mamá que era mi novio? No. Eso lo haría yo, en algún momento.

— Y...yo ya me iba. Encantado de conocerla Sra. Brown —dijo educadamente

— Llámame Marie, encantada de conocerte también

— Vamos, te acompaño a la puerta —dije. Me incomodaba estar entre mi madre y Matthew.

Una vez afuera Matt habló.

— Perdona, casi se me escapa decir que somos novios

"Somos novios". Esas dos simples palabras quedaron haciendo eco en mi cabeza. Simples palabras pero con un gran significado.

Es mi primer novio formal, nunca he tenido uno antes, y la verdad que me hace feliz escuchar esas palabras saliendo de su boca.

— No te preocupes, ya buscaré la forma de decirle a mis padres

— Esta bien, yo también le diré a mi madre. Pero quiero que tu estés presente, es decir, presentarte directamente. Digo, si estas de acuerdo —me hizo una sonrisita, por lo cuál casi me derrito ante tanta belleza.

— Bueno, lo haré si es lo que quieres —le devolví la sonrisa.

— Adios, linda —dijo acercándose y dejó un beso en mis labios— Más tarde hablamos

— A...a...adios Matt —articulé difícilmente. Me había dejado sin palabras, realmente no me lo esperaba.

Nada de esto me esperaba, nada. Quien iba a decir que le vida me daba otra oportunindad, y qué oportunidad!

Entré a a casa con una sonrisa en mis labios. Ni bien abrí la puerta noté a mi madre sentada con Kincade en brazos.

— Rose tiene novio, Rose tiene novio —cantaba mi hermano.

— Ya calla, Kincade. No seas molesto

— Mami, mami no lo ha negado!

— Ve a seguir jugando Cade —le ordenó mamá.

— Rose tiene novio, Rose tiene novio —seguía cantando mientras subía las escaleras.

— Hija, tienes algo para decirme? —dijo mi madre señalándome el sillón para que me sentara.

Obedecí y me senté. Miré al piso y empecé a hablar.

— No quería decirtelo todavía, quería esperar un poco para estar segura. Pero me has descubierto —hice una pausa y tomé aire— es mi novio

Mi madre se puso muy feliz por mi y me dijo que ella le diría a mi padre, ya que yo no me animaba.

Subí a mi cuarto, ya que tengo liceo al otro día y debo acostarme temprano. La felicidad que tengo es inexplicable, no paro de pensar en que la vida finalmente me sonríe.