Luego de todo lo que había ocurrido, no podía sacarla de mis pensamientos. Cada situación que la involucre se vuelve complicada o quizás yo complico todo. Aquella imagen permanecía en mi , verla sonriente junto a alguien más me hacía sentir molesto; molesto de no ser yo quien estuviera a su lado.
—¿Mr Aidan? ¿Me está escuchando?— la voz de Miss Kate logró que volviera en sí.
—¿Eh? Oh si , si Miss Kate—
—¿Qué le acontece Mr Aidan? Desde que le propuse dar el paseo no ha dicho ni una palabra—
—No es nada , no se preocupe—
—Oh mire quien está allí— dijo señalando hacía un costado del camino. —¿Cómo se atreve a hablar con el Príncipe Leonard?—
Y ahí estaba ella , una vez más la luz del sol hacia que su cabello brillara aún más dejando al descubierto la belleza que portaba. No podía ocultarlo más, no podía seguir engañandome, mis sentimientos eran reales, cada día mi admiración por Miss Elina aumentaba, aunque sabía que lo que sentía mi corazón sería un problema a futuro pero estaba seguro , correría cualquier riesgo.
—Miss Kate , creo que hasta aquí puedo acompañarla—Dije apartando su mano de mi brazo—Debo retirarme , espero que termine bien su día— le dediqué una reverencia pero antes de que me alejara completamente, Kate dijo algo que provocó que mi corazón se quedara sin fuerzas para latir.
—Es por ella ¿cierto?—
—¿Disculpe?—
—Olvide mis palabras Mr Aidan— respondió con una sonrisa— Estoy exhausta, iré rápido a mi dormitorio, espero verlo pronto— dijo dedicandome una reverencia y dándose la vuelta se marchó.
Volví mi mirada hacía donde se encontraba Miss Elina pero solo podía ver al Príncipe Leonard junto a Miss Relish caminando en mi dirección hasta que quedé ante la presencia de ambos.
—Príncipe Aidan es un gusto poder encontrármelo—
—El gusto es mío Príncipe Leonard—
—Espero que su familia esté muy bien de salud—
—Así es, muchas gracias—Respondí con una sonrisa en mi rostro— No les quitaré mucho tiempo, espero que nos volvamos a encontrar en el baile de invierno Príncipe Leonard , Miss Relish fue un gusto verla— Dedicándole una reverencia me alejé ante las miradas confundidas. Era poco apropiado despedirme de esa manera pero necesitaba encontrarla.
Me dirigí hacia el camino arbolado y la vi allí, jugaba al caminar , parecía divertirse con las hojas caídas, su risa era lo único que se escuchaba en todo el lugar hasta que el viento provocó que algo se le introdujera en el ojo. Ya no era su risa ahora su queja era lo que se escuchaba.
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Algo diferente cuando te veo
RomanceEl amor es un sentimiento hermoso cuando dos almas gemelas se encuentran en el mejor momento y de la manera menos esperada. Una persona puede enamorarse con un encuentro inoportuno en la biblioteca o con una gran declaración junto a un ramo de ro...