I WISH TO LOVE YOU [Kookmin]

Papá

La situación se había vuelto un poco incómoda después de todo lo sucedido. Sentían el mismo nerviosismo que sienten dos personas luego de besarse en alguna fiesta estando ebrios.

Solo que ellos no se besaron, aún así era extraño, pero Jungkook debía romper el hielo.

Pese a todo él era su doctor y no podía darse el lujo de perder el tiempo.

—Jimin ¿Terminaste de armar el rompecabezas?—preguntó tratando de acercarse un poco él.

El aludido alzó la vista y le mostró la mirada más inocentes que tenía.

—Terminé.—pronunció con volumen bajo y el corazón de su doctor comenzó a latir rápido.

¿Qué demonios estaba sucediendo con él?

—¿Te gustaría que hablaramos de tus sueños?—esperaba que esta vez Jimin fuese más abierto con sus problemas.—Está bien si no quieres hacerlo, sin embargo sería de gran ayuda que podamos avanzar con ello, tengo la sospecha de que no me has contado todo lo que sucedió.

El rubio suspiró con pesadez y se levantó de su silla para ir acomodarse en el sofá y al estar ahí, dio un par de golpes en el mueble para que Jungkook hiciera lo mismo y este lo entendió.

—Era mi padre, él me estaba ahorcando. Siempre es él, no puedo sacarme de la cabeza que todo fue mi culpa.—su nerviosisimo se hizo presente nuevamente—Lo intento doctor, juro que estoy intentando olvidarme de todo, pero no puedo.

Jungkook tomó una de sus manos al notar como jugaba con ellas.

—Jimin, esa no es la solución. No es mi objetivo ayudarte a olvidarlo, sino a superarlo poco a poco.

La oficina se llenó de un silencio que lejos de incomodarlos, esta vez les brindaba tranquilidad.

—¿Esto es algo que se pueda superar?—no creía que pusiese lograrlo.

—En primer lugar quisiera que entiendas que la muerte de tu padre no es tu culpa.—los ojos del chico se cristalizaron enrojeciendo sus párpados en el camino—Los seres humanos cometemos error tras error durante nuestras vidas, caemos, nos levantamos y volvemos a caer porque de esta manera aprendemos. Así como tu padre te amaba, estoy seguro de que tu también lo hacías y lo que le sucedió no es nada más que parte del ciclo de la vida. Algún día moriremos, pero si yo fuese tu padre, me gustaría que recuerdes todos los buenos momentos que vivimos porque ese es el único legado que dejamos aquí, nuestro amor, nuestra alegría y nuestra esencia.

Las lágrimas del menor pasaban por sus abultadas mejillas para terminar golpeando la tela de su pijama de algodón.

—Pero yo debí estar para él, solo pensé en mi. Le advertí muchas veces, pero al final lo dejé solo mientras yo vivía mi juventud y es por eso que no merezco estar aquí.—levantó el rostro y tomó al mayor por los antebrazos.—Él me odia, es por eso que me persigue. No puede descansar en paz sabiendo que sigo vivo aún cuando fue mi culpa. ¿Entiende? No puedo hacerlo, es doloroso, pero es necesario.—dijo en voz alta con desesperación.

Jimin tendría que ir reconociendo su problema o no avanzaría nunca.

—¿Me puedes contar un poco sobre tu papá?—la reciente pregunta lo descolocó un poco, pero se calmó y respondió.

—Mi papá era un hombre amable, cariñoso y muy inteligente. Leía mucho y sabía dibujar muy bien, a él realmente le gustaban mis pinturas. Jamás se perdió ninguna de mis exposiciones, era un hombre amoroso aunque guardaba muchos de sus problemas y tristeza.—recordar las ocasiones en las que lo escuchó llorar tras la puerta, no fue grato.—Nunca dejó de extrañar a mamá, pero no lo decía. Lloraba cuando estaba solo y yo incluso después de escucharlo, no pude nunca atravesar la puerta y fingía que nada había sucedido. No confiaba en mi.

—O tal vez no quería agobiarte con su dolor, justo como tú lo haces con las personas que te aman. Quizás deseaba de vez en cuando recordar a la mujer que amó, a solas y eso no está mal ni tampoco significa que no confiara en tí. Jimin, cada persona conoce su proceso y su manera de sanar. No quiere decir que no fuera feliz, la perdida no se olvida, se aprende a vivir con ella y tu padre fue un gran ejemplo de ello.

Esto era muy difícil de explicar, pero no imposible.

—No eres culpable de su silencio porque él lo eligió y mucho menos tienes responsabilidad de sus acciones. Como hijos todos somos negligentes en algunas ocasiones, deseamos salir y vivir, pero eso no nos hace malos hijos, solo nos recuerda lo que somos, humanos y como humanos nos equivocamos. No hay un solo hijo perfecto en este planeta, que tu no hayas cometido uno que otro error no te hace responsable de su muerte, en verdad estoy seguro de lo orgulloso que estaba de tí y ese sueño no es más que el reflejo de la culpa que sientes, pero cuando puedas entenderlo, desaparecerá.

—Yo lo extraño tanto.—pasó sus nudillos por sus parpados cerrados tratando de limpiar el líquido salado que caía descontrolado.

—Tienes razón en algo Jimin, tu padre no descansará en paz hasta que puedas volver a sonreír sin ese cargo cargo de conciencia que llevas sin razón.

—No puedo dejar de pensar en todo lo que pude haber hecho.

El hubiera es la palabra más dolorosa que puede existir aunque realmente decir que existe ya está mal. Hubiera no es más que un lamento para lo que no hiciste, no dijiste, no lograste, no pensaste, no sentiste y no podrás cambiar.

Llorar sobre la leche derramada no hará que el vaso vuelva a llenarse, pero aún así es lo que todos hacemos.

—Entonces, planteemonos pensar en lo que si hiciste. Quiero que logres recordar a tu padre con alegría porque tu felicidad fue, es y será – en donde sea que esté – la suya.

Esto hizo que Jimin recordara la melodiosa y contagiosa risa de su padre. Las noches en el balcón y el café bien temprano después de pasar la madrugada acompañando al rubio mientra terminaba la pintura que presentaría en un día importante.

Había olvidado eso, deseaba recordarlo un poco más.

La autora lamenta la tardanza, pero estuvo peleando con unos gatos que le querían pegar al suyo en la calle.

Gané por si se lo preguntan.

Muchísimas gracias por leerme, tqm para todxs.🤍

Melissart🌌