Capítulo 6

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Mi vista se nubló en segundos, los extrañaba tanto, me dolía pensar que sufrieron por algo que no pasó, saber que Amanda planeó todo hasta en los mínimos detalles. Acabó con mi vida, literalmente.

Suspiré y me levanté, miré por la ventana y pude ver un día más aquella calle tan bonita, habían casas alrededor, personas caminaban con sus perros y también niños. Todos se veían felices, ¿por qué yo no podía serlo?

Abrí la ventana, no era un lugar alto y cuándo cayera, tendría césped, la queda no dolería tanto.

Intenté hacerlo, hasta que Amanda abrió la puerta y vio la escena.

- Bájate de ahí, ridícula, ¿que haces? - bufó y se acercó, agarrando fuertemente mi delgado brazo haciéndome salir de dónde estaba.
- Quiero verlos... A Christopher y a Maite, déjame verlos una vez, después vuelvo aquí si prefieres.

- No, no puedo arriesgarme así.
- Verlos de lejos entonces... Porfavor, Amanda.
- Bien... Levántate, podrás verlos, de muy lejos, no te bajarás del auto ni nada de eso, ¿entendido?
- Si, claro - le sonreí amablemente, estaba feliz ahora -
- Aquí... - me extendió un vaso con agua - toma luego.
- Gracias - murmuré y lo agarré, bebiendo todo rápidamente - necesitaba esto...
- Ya, vamos.

Salí de aquella habitación y vi la gran casa de Amanda, era realmente grande y no entiendo porque me dejó en la menor habitación de todas. Ella no soltó mi brazo en ningún momento, hasta que entramos al auto.

Era muy díficil salir de aquél cubículo, lo hice dos veces en los últimos tres años. Siempre fue para ir a consultas y cosas así.

Pero esta vez los vería. A las personas que me daban vida sin saberlo.

- No abras la ventana, no grites, no hagas nada, Megan.
- Claro - murmuré - como digas.

Luego pasamos cerca de la casa, donde Chris vivía y era la misma de antes, mientras pasábamos él estaba con Maite en el patio adelante de la casa, por pocos segundos dirigió su mirada a aquél auto negro, quería gritarle que yo estaba ahí, que estaba bien y pronto estaría con él. Aún no estando segura de nada.

Amanda para empeorar la situación, detuvo el auto adelante de la casa y bajó su ventana.

- Hola cosita - dijo mientras se quitaba los lentes de Sol - ¿Como están?

|| 𝐒𝐢𝐧 𝐭𝐢 - 𝐂.𝐕 - 3ª 𝐭𝐞𝐦𝐩 𝐄𝐂𝐃𝐋𝐂 ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora