"Espesas nubes negras se podían distinguir en el horizonte, un silencioso presagio de una tormenta que rápidamente cubría el cielo azul; con increíble furia y un viento feroz picaba el mar que anteriormente se encontraba en completa calma, con su ir...
Una enorme disculpa, la inspiración se fue por la ventana, al menos para está historia, ya que mi mente loca me hizo iniciar al menos 3 borradores. En fin aquí está el capítulo y espero les guste 😊
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¿Cómo es que la situación había cambiado así? En un momento estaban tratando de ayudar y al siguiente fueron arrojados a las mazmorras del castillo.
Siguiendo las órdenes del Rey, los guardias apresaron al pobre de A-Yi y a sus amigos, los cuales fueron lanzados no muy amigablemente a uno de los calabozos.
A-Yi se puso de pie casi de inmediato, sin importarle cuanto le había dolido aquella caída, se dejó ir contra los barrotes y grito con todas sus fuerzas— ¡No lo entienden!, ¡Debo hablar con el príncipe! —clamaba una y otra vez, pero los guardias lo ignoraban.
Fastidiados de los gritos del chico uno de los guardias se acero hasta él— No lo creo chico, no saldrás de aquí, órdenes del rey —respondió uno de los guardias.
A-Yi aun con el corazón a mil por hora hablo— Pero, ¿Qué pasara con los animales? —preguntó tras un rato.
—Eso debiste pensar, antes de que tus animales los infectaran —respondió otro de los guardias con veneno y burla en su voz.
Esas crueles palabras le dolieron, ellos eran inocentes. — Pero... nosotros no hicimos nada —contestó A-Yi, pero sus palabras no fueron escuchadas.
Sin responder a lo dicho por el chico de la isla, los guardias dejaron las mazmorras y se marcharon a seguir con sus propios asuntos.
El lugar quedo en silencio hasta que A-Ning hablo— ¿De verdad somos prisioneros? —preguntó asustado, podía sentir como las lágrimas se acumulaban en sus ojos.
A-YI se acercó a su amigo y le consoló hasta que este se tranquilizó lo suficiente para dejar de llorar, aun cuando él mismo quería llorar, de miedo y tristeza ¿acaso Xichen también pensaba que ellos tenían la culpa? Tal vez por eso él no había venido a sacarlos de allí, las horas pasaron, pronto anochecería y comenzaba a creer que era así, Xichen no creía en ellos, era imposible que no supiera ya lo que ocurría en su reino.
De pronto la puerta de la mazmorra se abrió y por ella entro un guardia, su ceño fruncido se intensifico una vez que vio a los prisioneros, se acercó con pasos rápidos y arrojo sin delicadeza la bandeja que traía dentro de aquella celda, el contenido se desparramo por el suelo en su mayoría, salvo un poco del mismo que quedo en los contenedores y con desagrado dijo— ¡Comida para los prisioneros! —dicho eso se dio la media vuelta y se marchó tan rápido como llego,
—¿Eso responde tu pregunta? —dijo Zixuan a A-Ning con respecto a su pregunta de si eran prisioneros o no.
Zixuan miro con desagrado el desastre frente a él, pero su estómago rugió con hambre y aun encontrar de sus estándares se acercó a la bandeja, mientras tanto otro guardia ingreso con otra bandeja de lo mismo.
