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*Capítulo reescrito*

-Apenas es el segundo día y ya llegue tarde. -Me queje con Naya que estaba arreglandose las pestañas en el espejo.

-No te compliques Dess, es solo un atraso. -Respondió y se lanzó a la cama junto a mi. -Apenas tuvimos tiempo de hablar desde que llegaste, casi no se nada de ti.

Era verdad, no tuvimos mucho tiempo de hablar así que esta platica seria larga.

-Esta bien. -Dije y me sente en la cama con una almohada en mi regazo. -¿Que quieres saber?

-Primero, ¿porqué te cambiaste de universidad?

-Por el trabajo de mi padre, lo trasladaron y mi antigua universidad estaba muy lejos.

-Wow. -Naya se reacomodó en su lugar. -Ahora... ¿tenías novio en tu otra universidad?

Reí ante su pregunta, nunca en mi vida había tenido una relación con alguien y esperaba seguir así.

-No, nunca he tenido novio. -Sonreí avergonzada por la reacción de Naya.

-¿No? ¿Cuantos años tienes?

-Cumplí 19 hace una semana.

-¿Y jamás has tenido un novio?

-No es una prioridad para mi.

-Escondes muchos secretos Dess. -Dijo Naya con voz de presentadora de un canal de terror.

Ambas nos reímos y seguimos hablando durante un largo rato.

Cuando decidimos que ya conocíamos lo suficiente una de la otra, decimos salir de la habitación e ir comer en algún lugar cercano.

O bueno, eso es lo que Naya me hizo creer, en medio del camino cambiamos de dirección y nos dirigimos al piso, no tuve oportunidad de resistirme así que acepte para que tardaramos lo menos posible.

-Will no esta, adiós. -Sue nisiquiera levanto la mirada cuando Naya y yo entramos.

-También me da gusto verte Sue. -Dijo Naya mirando mal a Sue.

Sue puso los ojos en blanco y siguió leyendo su libro mientras comía helado.

Creo que nisiquiera noto mi presencia.

Creí que nos iríamos al no encontrar a Will, pero Naya tomo mi mano y me jalo hasta que ambas quedamos sentadas en un sofa.

Sentí la mirada de Sue sobre mi y eso me puso nerviosa.

-¿Porqué estas aquí denuevo -Sue cerró su libro y me miro fijamente.

Le sostuve la mirada a pesar de que estaba nerviosa, yo nunca bajaba la cabeza. Podía ser débil para algunas cosas pero mi cabeza siempre estaba en alto.

-Naya me invito. -Respondí sin romper el contacto visual.

-Naya no es la dueña del piso.

-Nunca dije que lo fuera.

Sue me dio una última mirada asesina, tomo el control del televisor y empezó a cambiar canal por canal.

-¡Ahí! -Gritó Naya cuando paso un reality de esos que siempre terminan en peleas.

-No veremos esa mierda. -Respondió Sue y siguió pasando los canales.

Nose cuantos canales más pasó, hasta que la cerradura de la entrada hizo ruido, dando aviso a que alguien llego.

Volteé un poco la cabeza y pude ver a Will entrando a la sala.

Una vez que Will salió de mi campo de visión pude ver que Ross estaba entrando también.

DESTRÚYEME | Jack RossDonde viven las historias. Descúbrelo ahora