Fuera de ficción

No hay manera...

La narración de Mayrin

Saliendo de la playa y tratando de calmarme manejé tranquilamente, ya había decidido no decirle nada a Marcus, llegué al departamento donde lo había dejado durmiendo antes, cuando abrí la puerta vino desesperado hacia mí y me abrazó fuerte.

Marcus: Mi amor, ¿dónde estabas? Estaba tan preocupado, ¿estás bien? ¿Qué sucedió? (Digo abrazándola desesperadamente, dándole besos y pasando mis manos por su cabello)

Mayrín: Cálmate, cálmate estoy bien, solo salí a caminar por la playa (digo tratando de omitir todo lo que pasó y tratando de no parecer tan desesperada y preocupada)

Marcus: Dios mío, nunca me vuelvas a hacer eso, tengo tanto miedo de perder y más aún después de que te paso...

Mayrín: Cálmate amor mío, no me vas a perder, está bien estoy aquí, no pasó nada (ser actriz en esta situación es crucial)

Después de eso estuvimos saliendo un rato y luego nos fuimos a dormir, Marcus al menos lo logró y yo estaba dando vueltas en la cama
El otro día me desperté y no desperté a Marcus, solo me vestí y le dejé una nota diciéndole que había ido a recoger algunas cosas a casa pero luego iría a Televisa, realmente me iría a casa después. lo que pasó, pero fue solo para contarles a mis hijos lo que estaba pasando cuando llegué allí caminé y cuando llegué a la habitación recuerdo lo que pasó, fui a la habitación de romina y llamé a la puerta una y otra vez y no sucedió No abrí, así que decidí entrar y estaba oscuro, y mi hija no estaba allí y encendí la luz y vi una nota en la cama y pensando que era de Romina, me senté en la cama y comencé a leer pensando en eso. Estaba escrito donde había ido con él, pero cuando terminé de leer comencé a gritar mucho como nunca en mi vida y comencé a llorar.

"He secuestrado a tu hija, y solo la dejaré ir si eres obediente, mi amor"

Empecé a gritar y llorar hasta que escuché sonar mi teléfono y lo contesté desesperadamente pensando que era Marcus.

Mayrín: Mi amo ayudarme ...

Eduardo: Mi amor que paso?

Mayrín (me sorprende escuchar esa voz) Enfermo, ¿dónde está mi hija?

Eduardo: Aahh y de qué quieres hablar ...

Mayrín: Cállate y dime dónde está.

Eduardo: Claro que lo digo, pero tendrás que ser muy obediente.

Mayrín: Haré lo que quiera para salvar a mi hija de ti, monstruo.