Daddy's Little Girl {MYG}

Capítulo IV

Atención⚠️: Capítulo extremadamente largo de 8000 palabras, son dos capítulos en uno.

Viernes 7:30 pm...

— Tienes que retener la respiración Soyeon.

— Yeji, me es imposible estar sin respirar por 30 segundos, hazlo rápido.

— Voy a apretar comienza a aguantar, 3, 2, 1, dale.

Cogí aire y lo retuve en mis pulmones para que Yeji me atara el corsé del vestido, el cual he de admitir que era precioso, la pelinegra tenía talento para esto pero con lo incómodo que estaba resultando ponérmelo le estaba comenzando a tomar odio.

— ¡Al fin! — exclamó y esa fue mi señal para volver a respirar.

— Joder — comencé a tomar aire como trucha fuera del agua.

— Eso digo yo — hizo una mueca estirando y contrayendo sus dedos — Nunca más haré un vestido con corsé si tengo que ponerlo yo, esto ha sido una odisea.

Le dí la razón, por lo menos podía respirar bien con el puesto, había sido más incómodo ponérmelo que tenerlo puesto.

— A ver, volteate déjame mirarte — pidió.

Me di la vuelta agarrando la falda del vestido.

— ¡Oh dios mío! — sonreí por su emoción, se notaba que le hacía mucha ilusión que llevara su diseño — Pareces una princesa que pronto será coronada reina — rodé los ojos.

— Espero que no.

— No seas aguafiestas, siéntate para peinarte, ya quiero ver la cara de oppa cuando te vea.

Yoongi.

Yoongi se había vuelto tan... expresivo y hablador que incluso me preguntaba si él siempre fue así antes y solo me trataba mal por sus complejos, porque parecía tan natural cuando me acompañaba a pasear a Holly o cuando se sentaba a mi lado en el sofá solo para hacerme compañía aunque él detestaba ver películas adolescentes, me hacía pensar que era así conmigo ahora porque le nacía y porque disfrutaba mi compañía, yo no podía estar más que feliz por eso.

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Cuando Yeji terminó de peinarme -que todo lo que hizo fue hacerme ondas en el cabello- me ayudó a bajar las escaleras con el vestido ya que arrastraba un poco, no de manera incómoda para caminar pero sí para bajar las escaleras, cuando estuvimos abajo Yeji acomodó la falda y me pidió hacer silencio quedando de espaldas a él mientras que ella caminaba hasta su primo. Yoongi estaba en el sofá vistiendo un traje de dos piezas blanco con una camisa azul noche mientras que le daba a Holly sus dedos para que se los mordiera.

— Oppa, ¿Qué tal estoy? — Yeji se paró frente a él y se dió una vuelta en su vestido blanco, sí, el suyo terminó siendo blanco.

Yoongi dejó de mirar a Holly para alzar la vista.

— Estás preciosa Yeji.

La pelinegra sonrió sonrojada.

— ¿Y que tal Soyeon? — me apuntó con un ademán de su cabeza y Yoongi se volteó aún sentado tan rápido que me hizo sonreír de lo expectante que se veía.