Capítulo 28

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- Katherine, por favor... vámonos ya. - suplico. Pero ella esta mirando al suelo de seguro pensando en las consecuencias de haber venido con Marcus.

- Ya te dije que ella no se va contigo. 

- No eres quien para decidir sobre ella.

- Tu tampoco que yo sepa, la heriste y eso no te da derecho a decidir por ella.

- Soy su protector, por orden de sus padres, me conocen más que a ti, imbécil. - me acerco mas a Marcus con el ceño fruncido y ganas de darle una patada en el trasero.

- Vaya, veo que tendré que presentarme con tus padres y poner una queja en contra de tu, "protector" - bromeó. - Katherine, ¿con quien te vas?

- Katherine, vámonos. - demandé.

- Al menos yo si la dejo escoger. - me miro a los ojos y puedo ver que ni él como yo queremos estar aquí, ambos queremos estar con Katherine.

No pude aguantar más y le di un puñetazo en su maldita cara dejándolo en el suelo, se estaba metiendo tanto, no entiendo como Kath puede juntarse en chusmas como él.

- ¡Daniel! ¡Qué acabas de hacer! Oh por Dios, ¿Marcus estas bien? - preguntó preocupada por Marcus ayudándolo a levantarse del suelo.

- Katherine, perdón... yo... yo no sé... no sé qu - me vi interrumpido por un puñetazo en el labio, proveniente de Marcus, ahora si estas muerto, cabrón.

Le tire otro dandole en la nariz, mis manos estaban descontroladas, sentía como la adrenalina recorría todo mi cuerpo, sentia como todo el enojo se esfumaba mientras que con cada golpe que sentía y recibia Marcus mas lo disfrutaba.

Katherine trataba de separarnos, pero como es tan diminuta no puede hacer nada al respecto.

Pobre minion - pensé.

- ¡Basta ya por favor! ¡Basta Basta Basta! ¡Daniel, basta!

Y ahí sentí una pequeña punzada en mi estomago, ¿de verdad Kath me había pegado? No podía creerlo, mi maldita mejor amiga acaba de pegarme para dejar de darle una paliza a su noviecito.

Me separe del cuerpo de Marcus y voltee hacia ella, ella temblando del miedo retrocedió.

- ¿Te doy miedo, Katherine?

- D-Daniel, aléjate.

- ¿Te gusta él? - señale a Marcus y vi como de su labio roto salía una sonrisa sarcástica.

- ¡Mierda, te dije que te alejes, Daniel!

Me voltee a ver a Marcus y me miraba sínico, como si le divirtiera como Katherine actuaba conmigo, pero claro le encantaba ver como Katherine iba a ir a sus brazos y no a los míos.

- ¡Púdrete, maldito imbécil! - me limpie la gota de sangre que salía de mi labio inferior y me subí al auto camino a mi casa, no podía seguir viendo como había empeorad todo, tenía que salir de ahí, y así fue, me fui decidido a alejarme de Kath, ella debía odiarme después de este loco día

Marcus

Sentía mucho dolor en mi nariz, estaba rota, de seguro, ese maldito es muy fuerte aunque me cueste admitirlo, es más fuerte que yo.

- ¡Auch!

- ¡Deja de moverte! Te estoy quitando la sangre. - dijo Kath, quitando la sangre de mi nariz.

Después de que ese imbécil huyera como cobarde traje a Kath a mi casa, no sabíamos si iba a estar en casa de Kath, pero ella no quería verlo ni en pintura. Vivo solo así que no hay problema con que se quedara unos días, pero ella tendría que ir a su casa por ropa. Pronto es Navidad y le dije que podría pasarla conmigo y ella amablemente me dijo que podría ir con ella con su familia, pero advirtió que me harían preguntas embarazosas.

- Katherine... - llame.

- Mmm... ¿Qué pasa? - subió sus ojos y no pude evitar perderme en ellos, eran impresionantemente verdes, estábamos tan cerca que podía sentir su cálida respiración.

- Te ves hermosa cuando te concentras - fue lo único que salió de mi boca, y sin mas estampe mis labios contra los suyos, Katherine de verdad me gustaba y la protegería como mi más preciada joya. 

Katherine separo sus labios de los míos, sorprendido la miré tratando de leerla y ya sabía lo que tenía, cómo pude ser tan estúpido.

- Marcus, yo- yo lo siento... es que... no quería, yo-yo... acaba de pasar lo de Daniel... y-

- Kath, tranquila, lo entiendo, yo lo siento no quería hacerte sentir incomoda.

- No esta bien. - Se levanto y salió por la puerta. Solté el aire que tenía retenido y con los codos en mis rodillas enterré mi cara en mis manos.

- Ah, y... que descanses, Marcus. - dijo Kath asomándose por la puerta y dedicándome una sonrisa genuina.

- Descansa, hermosa. - susurré para mi mismo cuando Kath salió de la habitación.

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No me maten, jeje

¿Qué les pareció este cap?

¿Creen que Daniel y Katherine se reconcilien?

No lo sé, será...

¿Creen que Marcus se declaré?

Jsjsjs, eso ya lo sabremos.

La mitad de mi ... siempre serás túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora