Punto de vista de Finn.
Caminé de un lado a otro mientras conversaba con el jefe de la policía. Me explicó más a detalle lo que había sucedido, sabía que Bee se sentía mal y no iba a escucharlo con atención.
—Está bien, muchas gracias, comandante. Manténgame al tanto de todo, por favor. Nos vemos mañana —le dije.
—De acuerdo, hasta mañana —se despidió de mí. Bufé un poco luego de colgar el teléfono. Giré la mirada hacia Bee, ella estaba sentada en el sofá, abrazándose. Noté que hacía mucho eso cuando estaba triste o preocupada, lamentablemente, no siempre tuvo a alguien que le ofreciera un abrazo cuando lo necesitara. Su padre no lo hizo siempre, y su madre le hacía falta.
Recordé la cantidad de veces que la oí llorar de noche, en silencio, intentando que yo no la escuchase. Pero lo hacía, y no sabía cómo interferir sin que sintiese que estaba invadiendo su espacio personal.
Yo solo quería verla feliz. Incluso si no era conmigo.
El día que salieron los resultados del ADN, recuerdo sentirme mal, y mucho más cuando los vi felices puesto yo no podía serlo junto a ellos. Me sentí egoísta.
Sacudí la cabeza para evitar —de nuevo—, esos pensamientos. Tenía la cabeza hecha un mundo, definitivamente necesitaba unas vacaciones.
—Listo —le dije a Bee, llamando su atención—. Nos pidió que estemos ahí a las cuatro de la tarde. —Ella solo asintió. El comandante necesitaba que alguien de la familia pudiese reconocer su cuerpo. Además de hacer una prueba de ADN, así sabrían si ambos tenían un parentesco. Bee se ofreció como voluntaria, ella no quería que su abuelo tuviese que pasar por un momento así—. ¿Estás segura que quieres hacerlo, Bee? —pregunté. Me acerqué un poco a ella, luego me puse de cuclillas, para estar a su altura.
—No quiero, pero como dije antes, me niego a dejar que mi abuelo pase por esto. Ya la pasó mal por culpa de Andrew antes. Jamás permitiría que deba ir a reconocer el cuerpo de su hijo, sé que le va a doler, por más que se haya portado mal con él. Bruce Tucker es un ser demasiado bueno para este mundo. No lo soportaría —respondió con un tono serio. Bee suspiró y se levantó. —Me voy a dormir, mañana tengo que trabajar, y será un día largo. Sobre lo que hablamos de Dom, Finn... Por favor, todavía no se lo comentes a nadie. Yo intentaré alejarme de él poco a poco, hasta que pueda solucionarlo. Pero ahora, mi prioridad es saber si Andrew murió, o no. —Ella bufó y negó con la cabeza—. Gracias por todo, Finn. Tú y tu padre se han comportado muy bien conmigo. Creo que de todo esto, me alegra haberme enterado que son parte de mi familia.
Otra puñalada.
Ella no se daba cuenta, pero cada vez que me llamaba de esa manera, mi corazón ardía. Escocía de una forma que nadie podía describir, a menos que lo viviese.
—Lo que sea por la familia, dijo Toretto —bromeé un poco. Ella soltó una risilla y me dio un pequeño abrazo. Palmeó mi espalda antes de hablar.
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Entre mis recuerdos
Teen FictionA través de los recuerdos que esconde el baúl de su madre, Bee descubrirá secretos familiares que la empujarán a vivir nuevas experiencias. ...