En busca de tu amor - Malec

A(de)claraciones

El hecho de ser honesto es lo que hace que la relación perdure.

•••

Era más fácil no tener que pasar por eso, Magnus tenia la certeza de que esto tal vez podría arrojar todo por la borda. Era más fácil quedarse y no lastimarse, era más fácil no escuchar lo que sea que Alec tuviera que decirle sobre aquella chica rubia.

Era mas fácil el no saber, pero era precisamente eso lo que lo asustaba. La incertidumbre.

"Vaya sentimiento complicado" pensó mientras se animaba a salir de su hogar.

Magnus siempre amo demasiadas cosas desde que apareció en la casa Lightwood. Amaba a sus amigos, amaba a esa linda familia que lo acepto, amaba el deslumbrante y pacifico jardín de la señora Ligthwood.

Amaba a Alec.

No entraba en pánico ante eso porque lo había hecho toda su vida, no existía excusa para eso. Magnus quería creer que todo estaría bien, había sido tan bobo como para dejarlo ir una vez y sentirse miserable. Él no debió de haber aceptado eso en primer lugar.

Pero ahora aquí estaba, escuchando cada oración con la atención necesaria repitiendo en su cabeza una y otra vez cada vez que el ojiazul aclaraba que ella fue solo una amiga. Que jamás la beso a voluntad aquella fría noche, que no tendrá porque hacerlo si siempre lo tuvo a él.

Viendo hacia el pasado, Alec nunca le dio razones para dudar de él, nunca hubo algún problema. Pero Magnus no había podido verlo desde ese ángulo y era apenas en este momento que comenzaba a entenderlo. El moreno se obligo a seguir escuchando como si de verdad no hubiera nada claro en lo que oía, detestaba el rumbo en el que iban sus pensamientos.

- Se que eso fue un problema - lo observo inseguro - pero debes comprender que para mi eso no fue nada, ¿Cómo podría siquiera pensar en arruinar lo más bello que tengo? -

Se sentía en una crisis. A Magnus le habría gustado haber llegado a esa conclusión hace un tiempo en lugar de estas aquí atento a las palabras que no le correspondían justificar a Alec. Comenzaba a saberlo, a saber que sin lugar a duda jamás hizo eso de lo que lo acuso.

- Yo solamente quiero hacerte sentir bien, no pudo saber cuantas veces debo repetir que lo siento para que lo entiendas. Si hay alguna razón por la que no debemos estar juntos no quiero que sea esto, no quiero caminar hacia otro lado sin ti, no podría soportar otro día sin ti. Me duele, me duele tener que dejarte ir -

- Alec... -

- Veo cada rincón buscando tus brillantes ojos o tu dulce sonrisa porque jamás he podido apartar la mirada hacia tu persona, me siento hipnotizado por ti. Quiero tomar tu mano y poner mi brazo alrededor de tus hombros porque siento frio de saber que no puedo retenerte a mi lado a causa de esta gran vereda entre nosotros. Eres un ángel Magnus, uno que deseo que me bese con cada fibra de mi ser y al que amo con cada célula de mi cuerpo, ¿Cómo puedo no amarte? si no decirte esto significa renunciar a lo que siento por ti entonces no lo quiero. Temo hacer esto, temo joder esta segunda oportunidad con mis palabras pero no puedo vivir sabiendo que no te las dije, que no lo intente -

- Alec, no...-

- ¡No hables si lo que harás será rechazarme! -

- ¡No estoy rechazándote! - levanto la voz exaltado.

- ¿Que? -

Magnus trato de parecer sereno acercándose a su chico cada vez más, por lo menos hasta tenerlo lo suficientemente cerca para tomar su rostro entre los cálidos dedos de sus manos y aproximarlo al suyo.

- ¿Cuántas veces tengo que decirte que no tengas miedo de hacer algo conmigo para que lo entiendas? - pregunto escuchando como el aliento de Alexander escapaba por su boca - solo debes decirlo. Tal y como lo sientes -

"¿Hacia cuanto no decía esas palabras?" se cuestiono antes de besarlo.

Quería ver la belleza de todo junto a Alec.