HeadCanons • Davick

27. - Cliché sin presupuesto. (AU)

Y ahí estaba yo, David Jones, un chico diferente a todos. No era guapo. Nadie se fijaba en mí...

De vez en cuando se burlaban de mí, no tenía muy buena vista, y me solía fallar mucho, así que usaba lentes grandes y gruesos que resaltaban mi anormalidad: una de mis pupilas está permanentemente dilatada, mientras que la otra no.

Caminaba con delicadeza por los pasillos, intentado que, de alguna forma, mis pies no dejaran alguna huella sobre el suelo.

Estaba ensimismado, pensando en mí, en cómo era mi vida, en que ser nerd o ser un ratón de biblioteca en la secundaria era un castigo, hasta que choqué con él: Mick Jagger, el capitán del equipo de fútbol americano... el chico que me gusta, además...

— ¡Fíjate por donde caminas, nerd!. — Gritó directo en mi oído, aguando mis ojos por las lágrimas que no tardarían en venir.

Los estudiantes que pasaban alrededor de nosotros nos miraban, y al cabo de un par de segundos, ya había un circulo entre los dos, esperando la pelea.

— ¿Qué?, ¿Vas a llorar, maricón?. — Siguió diciendo cerca de mi oído. Volteó y se dirigió hacia los chicos que nos miraban: — ¿Quieren que le dé una lección?.

Todos empezaron a gritar a coro "¡Dale!, ¡Dale!, ¡Dale!" como si yo fuera alguna especie de piñata en una fiesta infantil.

Me tomó de la camisa y me jaló, mientras que todos nos miraban, y me lanzó adentro de los sanitarios.

Estaba asustado, así que corrí hasta el último cubículo y cerré la puerta, hasta que me fijé, ¡qué genio eres, David!, ¡te metiste al cubículo que tiene la puerta dañada y no se puede colocar el seguro!, ¡bravo!.

Escuchaba los pasos de Mick, pasos fuertes, decididos, Dios mío, cómo me vuelve loco ese hombre.

— Ya sé dónde estás, sal. — Solté un no, podría encantarme, pero no me iba a dejar golpear, no por él... — Tranquilo, David, sal.

Su voz sonaba tranquila, me inspiraba confianza, además... seguía sin creerlo, ¡Mick sabe mi nombre!.

Me sorprendió el hecho de que, en vez de tumbar la puerta de un sólo golpetazo, esperó pacientemente a que saliera.

— Discúlpame por lo que hice allá afuera... — Suspiró mirando el suelo y jugando inquieto con sus manos. — Pero, no tengo alternativa.

Estaba analizando que me había pedido disculpas, ¡el fuckboy!, ¡pidiendo perdón!, Dios mío, ¿qué es esto?, ¿fanfiction.net?, ¿ao3?, ¿wattpad?.

Ah, claro, esto era un fanfic. Tiene sentido, el David real no sería tan fangirl, es obvio que esto está siendo escrito por una puberta adolescente pajera queer que desea ser andrógina y se corta el pelo a escondidas de su mamá. Oh, espera, ¿es legal romper la cuarta pared?.

Al volver a la realidad, Mick me tenía aprisionado contra la pared -la normal, la cuarta ya la había roto- no me estaba haciendo daño, pero no podía salir.

— Te tengo que dar tu lección, David, nada personal... — Ay, no, no, no, no quiero que me golpee. — Oh, espera, lo recordé, sí, sí es personal.

Cerré mis ojos esperando a que me golpeara, pero en vez de hacerlo, me quitó mis lentes cuidadosamente, mientras me observaba con... ¿amor?.

— David, me encantas. — Se me acercó más. — Sé que te encanto igual, así que... — Carraspeó algo, ¿apenado?, ¿¡apenado!?, ¡¿¡¿APENADO?!?!, ¿¡MICK JAGGER, APENADO!?. — Tú de por casualidad no quieres... Bueno... Ehm... Ya sabes... ¿Sí tú... — Rió nervioso.

Asentí y, hasta sorprendiéndome a mí mismo, lo besé, tomó mis caderas con delicadeza, apegándonos, sentía cómo se endurecía mientras me seguía en nuestra danza bucal.

Con cuidado, me subió al lavamanos, y...

Mierda, ya se acabó el presupuesto para esto.

Básicamente, sexooo.

Fin.

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tengo que admitirlo, tengo un fetiche con culiar en baños públicos, ya ven, existe Sanitarios y esta cosa.
eso de que no hay presupuesto es un chiste, sí lo hay, y sí, tengo un par de cosos sucios sueltos que podría haber pegado, pero dije "nah".
yyy lo de q angie es queer-, idk, no tengo ni idea de q soy, pero si me preguntan, soy bi 👍
quería hacer algo feo, pero lo releí y no me salió tan feo, wtf.

well-, los amOoOo, besitos, bonitos ♥️♥️♥️♥️♥️