Capítulo 30.

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La manada que se encontraba viendo aun al castaño comenzaron a notar que el ambiente se había vuelto más pasado, les costaba respirar un poco y no entendían la razón de eso, de repente escucharon una especie de sollozos, estos provenían de Stiles.

El temor y la preocupación llegó a ellos, trataron de ir a donde estaba sentado el de lunares, pero algo se los impedía, no podían pasar hacia el chico que en ese momento había empezado a llorar. Derek sentía el dolor que Stiles estaba sintiendo, era como si estuviera viviendo o presenciando algo tan horrible que las lágrimas y ese sentimiento eran imposibles de retener.

Por más que trataban de pasar no lo lograban, era igual que con las cenizas de montaña o como ocurrió con Liam cuando el híbrido se lo raptó. Era tanta la frustración del moreno que comenzó a golpear esa fuerza invisible que no lo dejaba pasar y confortar a tu pareja, seguido de Cora también había empezado a golpear y así sucesivamente todos lo estaban haciendo.

—Stiles, por favor —trataban de llamar al menor—. Si estás haciendo esto detente.

—Tienes que bajar la barrera, Stiles —el pequeño beta siguió al Hale—. Estamos contigo.

Aunque fueran unas hermosas palabras no tenían efecto, el chico se encontraba tan metido en los recuerdos que lo que sea que estuviera sucediendo fuera de su mente era completamente irrelevante. Para ese entonces Stiles comenzó a elevarse del suelo y algunas de las hojas, tierra y pequeñas piedras también se elevaban con él.

—Stiles tienes que detenerte, sabía que esto sería una mala idea —el Hale se preocupaba aún más.

No importaba si era imposible pasar, ellos aun seguían y seguían tratando de derribar la barrera que les impedía llegar al castaño. Incluso Isaac tomó una roca de buen tamaño y la lanzó, pero el resultado fue ver como esta se deshacía y se volvía polvo. Internaron tirando más de estas por si lograba hacer algo, cuando todos terminaron en el suelo gracias a unas raíces que habían salido de entre la tierra y se enredaron en sus piernas.

Trataban de soltarse y cuando veían que se rompían volvían salir otras más a tomar el lugar de las que fueron destrozadas. Justo en el límite del domo, se encontraba una persona con una túnica de color negro que le cubría de pies a cabeza. En las manos del desconocido había una esfera plateada con negro, la cual fue lanzada y teniendo como consecuencia la destrucción del domo.

Derek al ver que aquel desconocido se acercaba a su pareja sacó toda la fuerza que tenía en su interior, rompiendo así todas las raíces que lo tenían sin movilidad alguna. Viéndose liberado corrió hasta el de la túnica, su rostro ya estaba en su fase Beta, los dientes filosos y las garras que salían de sus dedos, esas que podían ayudarle a atravesar la carne de cualquiera de sus enemigos.

—¡Aléjate de Stiles! —sus palabras salían acompañadas de gruñidos—. Si no quieres salir herido.

Se escuchó la risa venir del desconocido y como si las palabras de Derek no hubieran sido nada más que simples balbuceos de un bebé, mandó directo al Hale una esfera igual que la anterior, el moreno logró esquivar y ver que esta impacta con los restos de la mansión, eso lo enojó demasiado.

—¿Qué? —la pregunta fue fingida—. Es cierto, chucho —volvió a reír—. Allí están los restos de tu familia.

El corazón de Derek sintió sufrió de una punzada por esas palabras y como si fueran el detonante de una bomba llegó hasta quedar a un paso del sujeto para luego intentar darle un golpe en su cara cubierta, lo que obtuvo fue que una raíz saliera y detuviera su brazo.

—Nunca bajes la guardia, perro —hizo un movimiento de manos y logró lanzar a Derek lejos—. Ahora si me permites —vio al castaño flotando—, voy a llevarme lo que nos pertenece.

Legado oscuro ~ [ Sterek ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora