Parte 5 Revoltosas en el tren 2

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Capítulo 3 - 2


El toque en la puerta me hace reaccionar debe de ser el mesero, para anunciar la cena, me dispongo abrir la puerta, y no me equivoque es el empleado.

—Señor, le anunció que la cena se servirá a las 7:00 pm, aquí está el menú.

Tomo la carta en mis manos y elijo un plato de frutas, ensalada y pollo.

—Deseo que me lo sirvan aquí por favor —le indico al joven.

—Como usted ordene señor, puedo pasar a cambiar la jarra de agua.

—Claro, adelante, ¿Quién se hospedan en el camarote de alado?

—Son unas señoritas de muy buena familia, porque ese camarote es el más grande y caro que tenemos.

—Ya veo ¿son varias?

—Sí, creo que son tres.

—Gracias.

—Para servirle señor, dijo el joven y se marcho.

—¡Por Dios! lo que me faltaba pensé que eran dos, tendré que cuidarme que no me vean, no quiero correr el riesgo de que me reconozcan y corran la voz en el tren.

Terry abrió la puerta de su privado para observar el pasillo, tenía deseo de salir a caminar, pero con tanta gente prefiere hacerlo de noche, escucha el murmuro de las personas que se aproximan y rápidamente empuja la puerta sin cerrarla por completo en el fondo tiene curiosidad de conocer a las urracas ruidosas de al lado, y efectivamente ve pasar cuatro personas tres mujeres y un hombre una de ellas parece mayor, el hombre es un empleado porque viste el uniforme y las otras dos son jóvenes, pero no logra ver sus defectos, ambas visten ropa de lujo y a la moda, zapatos correa T, no se les puede ver el cabello porque sus sombreros lo cubren, una de las jóvenes es esbelta y de curvas suaves, pero quizás tenga cara de iguana por ser delgada no puede tener cara grande, dede de ser menuda como una iguana. 

Terry comenzó a reír de su propia imaginación, esperará a que todos se acuesten para poder salir a dar un paseo.



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Candy y Patty se reunieron en la estación, para tomar el Tren camino a los Ángeles, ya estaban rumbo a su destino e instaladas en su camarote de lujo, George como siempre reserva lo mejor para ella, en la estación se llevó una gran sorpresa el mismo Albert y George acompañaban a Patty, Candy  los saludo efusivamente los abrazo y les dio un beso en la mejilla, feliz de verlos, aunque sea por un momento y les entrego los paquetes que las maestras enviaron.

Albert inmediatamente abrió su paquete, le gano la curiosidad, dio un vistazo rápido y lo cerro por su contenido: una botella de vino casero, queso de cabra, galletas y un frasco de mermelada de arándanos, su favorita.

UN AMOR REESCRITO A TRAVÉS DEL TIEMPODonde viven las historias. Descúbrelo ahora