Capítulo 10: Protégelo III

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Lan XiChen había estado averiguando sobre la extraña niebla, pero al parecer nadie más que solo él, fue el que la pudo atravesar. Al parecer al estar cerca de esta, el cuerpo de los cultivadores se helaba y la sangre iniciaba a congelarse, XiChen quiso saber mas acerca de esto, pero como el no la había visto, no estaba seguro de esto, el mismo no podía dar una descripción acertada, despejando su mente y al ver que no averiguaría nada, solo se rindió.

Ya sabía que no vería al joven Jiang y eso lo irritaba, ¿por qué lo seguía evitando? ¿tanto le molestaba pasar tiempo con él? Esos días ni en un solo momento dejo de sentir ira, aun así, no lo busco, se sentía fuera de sí. La puerta sonó, extrañado se puso en pie y la deslizo

-Er Ge – Meng Yao abrazo a Lan XiChen en cuanto visualizo a este, le primer jade sintió el fragante aroma del omega invadirle sus sentidos.

- ¡A Yao! – Lan XiChen no salía de su sorpresa - ¿Qué haces acá?

-Hoy llego la comitiva del clan Nie, le pedí autorización al líder Nie para venir ¿no te alegre verme? - El joven veía con una gran sonrisa al primer jade, haciendo que a este le pesara la conciencia.

- Me alegra, sí, pero fue muy sorpresivo – Lan XiChen seguía sin salir de su asombro

-Lo noto, ¿puedo pasar? – Meng yao hablo, ya que aun continuaban en la entrada del Hanshi.

-Claro, disculpa mi descortesía – Hizo un ademan y el joven lo siguió – A Yao debo comunicarte acerca de lo que sucederá con el compromiso – Lan XiChen debía ser honesto con Meng Yao y dejar de aplazar aquello.

-Te escucho – Sonrió Y abrazo el cuello del primer jade – Er ge te extrañe – Beso la mejilla y Lan XiChen sonrió, le agradaba sentirse apreciado de esa forma, un sonido fuerte lo hizo alzar la vista para visualizar al joven Jiang, solo con verlo un frio recorrió todo su cuerpo.

-Joven Jiang ¿se encuentra bien? – Meng Yao se separo del jade y se acercó a Jiang Cheng – Disculpe, no lo he saludado correctamente – Meng yao se inclinó 90°, pero Jiang Cheng no se movía, estaba tratando de procesar lo que acababa de ver

- Joven Jiang corresponda el saludo – Lan XiChen se acerco al joven que parecía convertirse en una estatua

-Yo.... lamento interrumpir – Jiang Cheng se inclinó, para después acuclillarse e iniciar a recoger los diferentes pedazos de los platos.

-Permítame yo le ayudo joven Jiang – Meng Yao sonrió amablemente y se acuclillo junto al joven e inicio a recoger los pedazos, sin embargo, con uno se hizo un corte ligero - ¡Ah! - Se quejo

- ¿Estas bien A Yao? – Lan XiChen se acerco a los omegas en cuanto escucho el sonido y tomo suavemente la mano del joven acuclillándose a lado de este.

- Lo estoy, curara rápidamente- Sonrió, Jiang Cheng alzo la vista y sintió que algo se partía aún más, XiChen se veía con autentica preocupación, los dos lucían bien, era como si hubiesen sido hechos el uno para el otro.

-No tienes por qué esperar eso – XiChen sonrió – permíteme curarte – Meng yao asintió y los dos se pusieron en pie, XiChen guio al joven y lo sentó en la cama, mientras XiChen traía lo necesario.

Jiang Cheng siguió recogiendo los pedazos, mientras observaban las diferentes escenas y entendió el porque hiciese lo que hiciese jamás se llevaría bien con el primer jade, entendió porque este se había opuesto al matrimonio, él estaba enamorado de alguien más, de alguien que si parecía merecedor del maravilloso líder.

Algunas pequeñas cortaduras se abrieron en las yemas de sus dedos, pero acostumbrado al dolor de sus manos no las sintió, al finalizar se puso en pie y sostuvo con mas fuerza la bandeja, sin importarle el dolor que llegase a sentir.

Rompiendo promesasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora