"¿Podemos regresar el tiempo? ¿Donde tú y yo nos amábamos sin control?"
Yang Jungwon era un chico que fue obligado a casarse a una temprana edad con Lee Heeseung, iniciando así una unión que estaba destinada a ser más complicada de lo que él podría...
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—¿Jay? —Murmure.
—¿Dices algo hijo? —Baje la mirada y negué.
—No, solo está pensando —Volví a levantar la mirada y lo vi recibiendo una bolsa con cuerdas.
—Por favor siéntense en las sillas, que pronto comenzaran a servir la comida —Dijo uno de los camareros.
—Vamos Woonie —Heeseung entrelazo su mano con la mía —Vamos a sentarnos en esa mesa — señalo.
—Está bien— Lo seguí sin dejar de pensar en que estaba pasando.
—¿Quieres comer esto?— ¿Qué hacía Jay en el almuerzo de los Yang y los Lee? —¿Jungwon?
—Lo siento estaba algo distraído, está bien ese platillo para mí, perdón, pero tengo que ir a los servicios —Me levante de la mesa y camine unos metros y volví a chocar con alguien.
—Lo siento Jungwon —Una dulce voz hablo.
—Lía... nos volvemos a cruzar —Me cruce de brazos —Ve y siéntate al lado de él —exclame.
—No es necesario me sentaré junto a los empleados.
—Señorita siéntese en nuestra mesa —Dijo mi padre sin darse cuenta de la penosa situación.
Seguí caminando tratando de evitar lo que sucedía detrás de mí— ¿Por qué sigue doliendo? —Susurre y me metí en una cabina de los baños.
Saque mi celular y comencé a jugar con la funda que tenía esta, mordí mis uñas esperando una señal para irme a casa, fue mala idea haber venido a este lugar, del desespero comencé a llorar, si salía alguien me pediría explicaciones y no tenía ganas de hablar.
—No ganas nada llorando, yo que tú me siento y escucho al músico que va a tocar durante el almuerzo —Sonreí levemente al escuchar esa voz.
—¡Jay! —Salí casi corriendo.
—No tenía idea de que vendrías a un lugar como este —Río al abrazarme.
—Solo vine a visitar a mi padre, no es gran cosa —Sonreí —¿Qué haces aquí?
—Trabajando y supongo que vienes acompañado de tu esposo —Tomo mi cintura y me pego a su pecho.
—Algo parecido —Me mire en el espejo del baño y reí por la expresión de duda de Jay— Voy a ser libre.
—Será mejor que vayas a comer, pueden buscarte si no vas —Sonrió y me empujo hacia la puerta de salida.
—Tienes razón, Heeseung me puede buscar —Salí del baño tratando de ocultar mi nerviosismo y algún tipo de cosa extraña en mí.
Camine lentamente hacia la mesa en la cual se encontraba mi padre y mi esposo sentados comiendo, me senté al lado de Hee, levemente escuche un susurro de su parte. —¿Quieres que le diga a alguien para que caliente tu comida?
