El chico sombra ✧ YoonMin ✧

017

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Llegue a la escuela, todos hablaban a susurros mientras miraban cada uno de mis movimientos, vaya que todos estaban muy interesados en lo que paso. Entre a mi salón sin mirar a los demás, me senté en mi lugar en una esquina del salón junto a la ventana, después de unos minutos llego Tae.

- Jimin ¿estás bien? – el chico hablo en susurros.

- Sí – era la verdad, no me sentía mal- estoy bien – conteste tranquilamente.

- Que bueno, como todos están... ya sabes hablando, me preocupe – confeso el chico un poco nervioso.

- No te preocupes, me da igual – mientras le daba toquecitos al asiento a mi lado.

- Cuéntame que fue lo que paso ayer – Tae se acercó un poco más a mí.

- Bien, lo haré lo más concreto posible – me acomodé para quedar frente a frente - iba a la tienda cuando me encontré, no mejor dicho choque con Soobin, él se ofreció a acompañarme a comprar algunas cosas, yo accedí, al salir de la tienda Jackson me jalo.

- Ve al grano – en ocasiones me daba risa lo desesperado que podía ser Tae.

- Quería besarme, pero yo no se lo permití ni permitiría, empecé a forcejear, pero no me soltaba, así que llego Soobin y lo golpeo – un suspiro escapo de mis labios.

- Que caballeroso de parte de Soobin, ¿no crees? – el contrario dio unos golpecitos en mi hombro con el suyo.

- sí, supongo.

- ¡¿Cómo que supones?! – me acaricie la oreja, ya que casi me rompe un tímpano y todo el salón volteo a vernos.

- Bueno, es que no sé – yo seguía hablando casi a susurros - no es muy de presumir que alguien golpeo a otra persona por ti.

- Ay Jimin– solo se me ocurrió sonreír.

- es raro – comente de la nada.

- ¿Qué? – Tae me miro enseguida.

- mira – dije señalando el reloj y después el espacio vacío cerca de nosotros.

- faltan dos minutos para que toquen – comento el chico.

- pero es raro ya que... - deje la frase abierta para que él la completara.

- Soobin no ha llegado – dijo Tae en un susurro, como si hubiese resuelto el mayor misterio.

- Aja – él era sumamente puntual, espero no tenga nada que ver lo que paso ayer.

- ¿Qué le habrá pasado? - levante mis hombros en gesto de duda, nos quedamos callados, comenzó la clase.

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Termino mi primera clase, sentí una mirada sobre mí, así que mire en la dirección que mi intuición me señalo, él estaba ahí recargado en la pared, sin una expresión concreta, nuestras miradas se cruzaron y pude apreciar que en su rostro se dibujó una pequeña sonrisa, la cual imite, me sentía más tranquilo ahora.

Me dirigí a la siguiente clase con Tae, al llegar nos topamos con la noticia de que no llego la maestra, al parecer le surgieron unas cuestiones familiares, así que tenía una hora libre.

- Dios, ya casi termina la clase y no he ido a dejar esto, ya vuelvo, voy a entregar estas cosas – comentó Tae mientras me mostraba las carpetas que tenía en mano.

- Sí, yo no me moveré de aquí – Tae salió del salón, mientras tanto, tome mi móvil, saque mis audífonos y busque una buena canción para pasar el rato, de repente alguien coloco su mano sobre uno de mis hombros.

- Ya saben que no me gusta que me toquen por la espalda – comente sin tomar atención de quien estaba atrás de mí.

- Ni, aunque sea yo- enseguida reconocí la voz gracias al bajo volumen de la música.

- No, ni aunque seas tu – dije en broma.

- Que rudo – el chico soltó una corta risa, para después sentarse frente a mi - ¿me perdí de algo en la clase anterior?

- no tranquilo – la canción había terminado, así que, desconecte mis audífonos, guardándolos en mi mochila junto a mi móvil – oye Soobin.

- Si – el mencionado me miro atento.

- ¿Por qué llegaste tarde? – Soobin se quedó quieto un momento, pensativo.

- Ayer tuve que ir a hacer algo que salió de imprevisto – pude ver de reojo a Jackson mirándonos desde la puerta del salón al igual que Sana al parecer alguien les dijo que mi grupo no tenía maestro y vinieron a saltarse la clase.

- Oh ya veo – no sabía que más decir, pero me tranquilizo que su retraso no tuviera que ver con el percance del día anterior- ese golpe fue muy certero, por desgracia no le rompiste la nariz, eso me decepciono – y comenzamos a reírnos.

- Si quieres la próxima vez lo hago- mientras me reía le di a entender que no con mi dedo índice.

- Está bien, ¿puedo preguntarte algo? – comento el chico mientras nuestras risas se calmaban.

- Claro Soobin, además no tenemos nada interesante que hacer.

- ¿puedo acompañarte a tu casa hoy? – la voz del chico se tornó un poco tímida.

- sí, no veo ningún problema – además, me gustaba su compañía.

- hola, hola mucha tensión- decía Tae mientras hacía señas de tomar algo en el aire con su mano derecha.

- no, no, no para nada, bueno, no se Soobin y ya era hora de que llegaras, pensé que te habías ido a hacer los papeles otra vez – Tae simplemente se rio.

- Pues yo estoy bien – comento el chico mientras reía por nuestros comentarios.

- Mejor los dejo, así como están se ven tan lindos juntos- expreso mi querido mejor amigo.

- ¡Taehyung! – me quede un momento mirándolo, se dio la vuelta y se fue con Jungkook, dejándome otra vez a solas con Soobin.

- Por cierto ¿Cómo es que sabes golpear tan bien? – él se quedó quieto, en silencio, eso no me gusta para nada, comencé a ponerme nervioso, pero después de lo que pareció un largo silencio Soobin contesto.

- Mi madre me llevo a unas clases de defensa personal y esas cosas, ahí aprendí- me quedé calladla pensando por unos momentos - ¿Qué pasa?

- nada, nada – por suerte me salvo la campana

- este módulo fue muy rápido – comentó Soobin mientras tomábamos nuestras cosas.

- si tienes razón – al girar mi brazo para guardar mis cuadernos tire mi lapicera, había olvidado que la saco Tae para llenar sus papeles, este día iba mal, comencé a recoger mis cosas. 

Aquí otro capítulo, espero les guste y una disculpa por la ausencia, tengo varios proyectos y a veces no me da tiempo de escribir.

Gracias por el apoyo.