Una Historia Inesperada

Un regalo no previsto

                         CAPITULO XVIII

Cuando fui a abrir la puerta miré para todos lados pero, no había nadie hasta que se me dio por mirar hacia abajo, en el suelo había una canasta con un pequeño cachorro Yautja dentro de ella, me agaché para verlo y lo agarré en brazos, estaba cubierto con una manta y al abrir sus ojos reveló un hermoso color azul, pensé que tendría unos pocos meses por su tamaño, y Jhedin'n grito...

-VI ¿OCURRE ALGO MALO?-.

–NO-.

Miré hacia ambos lados para ver si había alguien pero no, así que entré de espaldas y todos me miraban

An'ut preguntó -Vi ¿Qué tienes en las manos?-.

No dije nada y me di vuelta para poder ver las caras de sorprendidos de todos al revelar el cachorro, Scar dijo -eso ¿es un cachorro?- todos murmuraban.

-si estaba en la entrada pero, hay algo curioso, este cachorro yo lo conozco, salvé a su madre y a él hoy en la tarde, lo que no entiendo es ¿qué hace acá en donde está la madre?-,

Celtic pregunto -¿estaba solo?-.

-sí, no había nadie más, otra cosa curiosa es que ¿cómo sabia la madre que yo vivo acá, me habrá seguido y por qué me lo dejo a mí?-.

Wolf preguntó... -¿sabes quién es esa mujer?-

-la conozco de vista pero, no personalmente, no sé quién es pero, ¿por qué me dejó su hijo?-.

An'ut dijo -quizás ya no podría cuidarlo-.

-si pero ¿Por qué?-.

-oh pues, no sé tal vez ya no podría mantenerlo por algún problema que tenga-.

-pero no puedo aceptar a este niño, necesito encontrar a la madre y tratar de ayudarla ¿Quién puede mientras tanto tener al bebé?-.

An'ut se ofreció y se lo entregué.

Salí a buscar a su madre, como era de noche no podía ver mucho sin embargo, confié en mis instintos y seguí corriendo y trepando en los techos pero, no habían rastros de esa mujer, para colmo empezó a llover y yo detesto la lluvia, así que regrese a casa de Scar.

Con la cabeza agachada, entré, sin éxito dije -no pude encontrarla-.

Me sequé y en ese momento no sabía qué hacer, me puse a pensar, por alguna razón esta mujer me dejo su hijo a mí, algo habrá visto en mí que no lo ha visto en otras mujeres, así que decidí tomar al pequeño y ser su tutora hasta que crezca, en eso Jhedin'n y An'ut me preguntaron -¿sabes cómo cuidarlo?-.

-no creo que sea un problema, mientras que pueda conseguir una cuna y ropita, sé cómo cuidarlo-.

-está bien- dijeron.

An'ut dijo -yo haré la cuna y te la daré como regalo-.

-oh muchas gracias-.

-no hay porque, todo sea por el pequeño-.

-pero... también necesito trajecitos- y

Jhedi'n dijo... -yo los haré para el pequeño-

Le sonreí y le dije. -está bien-.

Me había olvidado de que Dark aún seguía aquí, un guerrero legendario seguía en mi casa, le ofrecí quedarse aunque Scar lo miraba con una cara de muerte, le dije que se tranquilizara -¿Qué es lo que te pasa?-.

-no me gusta que este cerca de ti-.

-Scar no seas celoso, solo es un amigo nada más, además le tengo que tener respeto si o si ya que es un guerrero-.

-está bien- respondió con una voz rasposa mientras fruncía el ceño, algo que me acordé era que el niño necesitaba un nombre pero, como lo puedo llamar, pensé y había un nombre que me gustaba mucho y Scar me pregunto

-¿Cuál?-.

Yo respondí –Prince-.

Todos dijeron -¿Prince?-.

Y dije –si- giré para verlo como se movía y miraba a todos y dije -escuchaste eso pequeño, tu nombre será Prince- me miraba y soltó unas carcajadas antes de volver a quedarse dormido.

Faltaba para la cena y Prince seguía dormido, hasta que por fin la hora de la cena llegó y tuve que levantarlo para poder prepararle algo, Jhedin'n me dio una especie de mamadera y dijo que le preparara una leche tibia, era de esperarse eso, aunque no sé de dónde sacan leche pero, igual me concentré en eso y luego en sentar a Prince para darcela hasta que se durmió nuevamente y ya todos a sus casas porque ya era tarde, lo acurruque en mis brazos, por ahora dormirá en la cama hasta que An'ut haga la cuna, no dormí en toda la noche porque tenía miedo que le pasara algo, en cambio Scar ya se había dormido.