Mi buen amor [Kazutora Hanemiya]

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Flashback:

La pequeña jugaba tranquilamente en la plaza con sus muñecas, las deslizaba por el tobogán y las columpiaba en los columpios. Llevaba un buen rato cuando escuchó un llanto a pasos de ella. Rápidamente se volteó y pudo ver a un niño, que parecía ser de su edad, llorando desconsoladamente.
—Oye, ¿estás bien?—se acercó a él corriendo. Él la miró extrañada, no la conocía.
—No pasa n-nada.—dijo secándose las lágrimas rápidamente y desviando su mirada al suelo.
—No me gusta ver a la gente llorar, mejor ven conmigo a jugar. Tengo dos muñecas.—dijo tomándolo de la mano tiernamente.
El niño aceptó y fue con ella, a pesar de que sus padres le habían dicho que no hablara con extraños en quien menos quería pensar en ese momento era en ellos.
—¿Por qué llorabas?—preguntó la niña con curiosidad.
—Es un secreto.
—Pero somos amigos, podemos tener secretos juntos.—insistió, el niño lo pensó y aceptó.
—Mis padres van a divorciarse.—dijo apenado— Y no quiero que se olviden de mí.
—Mis padres también están divorciados.—el chico se sorprendió.
—¿En serio?
—¡Sí! No es tan malo como parece.—la chica trató de pensar en lo positivo de la situación—Pero antes también estaba triste y quería que estuvieran juntos.
—Sí. Oye, ¿cómo te llamas?—le sonrió a la chica por primera vez.
—__, ¿y tú?
—Kazutora, ahora somos amigos.
—Mejor seamos mejores amigos.
—¿Mejores amigos?
—Si, porque nos contamos secretos y jugamos juntos.
Al chico le brillaron los ojos al oírla, era su primera amiga.
Así se habían conocido.

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—Kazutora, ¿sabes por qué los grandes se dan besos?
—Mmm no, nunca he visto a nadie darse un beso, excepto en las películas.
—El nuevo novio de mi madre siempre le da besos, no entiendo por qué.
—¿Quieres que te de uno?
La chica se sonrojó inocentemente.
—¿No somos muy pequeños?
—No lo creo, es solo uno.
Ella asintió.
Kazutora juntó sus labios, ella lo imitó, ambos cerraron los ojos y se acercaron, sin ninguna experiencia más que haberlo visto en adultos.
Y sus labios se rozaron, un cosquilleo de vergüenza recorrió a la chica y se alejó rápidamente. Pudo observar a Kazutora sonrojado aún con los ojos cerrados y sus labios juntos.
Soltó una risita.
—¿Beso bien?—preguntó el chico.
—No lo sé, es mi primer beso.
—El mío también.

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Ya había calmado mi llanto, estaba recostada sobre la cama de mi madre viendo televisión junto a ella. Pensamos que sería una buena manera de distraerme, pero no fue así. La película que estábamos viendo se vio interrumpida.

Noticia de último minuto, nuevo conflicto entre bandas de delincuentes deja un muerto y un detenido. La pelea se habría originado por un conflicto entre la recientemente conocida banda "Tokyo Manji" y "Valhalla".
Sin embargo, quien es victima fatal fue apuñalado por un compañero de su propia banda. El nombre del posible culpable es Kazutora Hanemiya, quien ya tenía antecedentes de delitos anteriores y quien no hizo resistencia ante la policía, entregándose sin objeciones. Dentro de las próximas horas se confirmarán los hechos ocurridos.
El nombre del fallecido es Baji Keisuke. Nuestras condolencias para su familia.

En ese instante lo confirmé y procesé en su totalidad, no volvería a ver a Kazutora. No sabía cuánto tiempo estaría detenido, pero serán por lo menos años, es un delito gravísimo, y no creo que declaren a su favor. Yo tampoco lo haría.

Mi madre apagó la televisión apenas la noticia terminó, se sentó a mi lado y me abrazó. Las lágrimas que estaban retenidas en mis ojos comenzaron a salir rápidamente. No era un llanto silencioso, era un llanto con dolor, con angustia y desesperación, mi madre no dijo nada, simplemente me abrazaba y sobaba mi espalda.

Estaba destrozada, en mi cabeza daban vuelta todos nuestros recuerdos de infancia, y también lo que alcanzamos a vivir durante estas semanas. Me ahogaba en mi propio llanto, no podía con esto. Quería entender por qué lo había hecho, era Baji, su mejor amigo. Quería entender qué podía hacer desde mi situación para ayudarlo. Quería entender simplemente, si debía ayudarlo o no.
Sentía un dolor incontrolable en el pecho, quería creer que esto era solamente un sueño, una horrible pesadilla, pero estaba pasando, Kazutora había sido arrestado nuevamente y Baji estaba muerto.

Lo perdí de nuevo, pero esta vez no sabía si quería volver a recuperarlo.

¡Estúpido Kazutora!