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Pov Liam

A la mañana siguiente lo primero que hice cuando desperté fue tomarme la infaltable píldora para luego darme un baño, cambiarme y hacer lo mismo con mi pequeño. Cuando salimos estaban los hermanos esperándonos para poder comer el desayuno. Cuando terminamos tomamos las cosas que ya estaba ordenadas y nos fuimos a nuestra nueva estancia, la casa del señor Abel, mi padre.

-- Bienvenido joven Liam, les mostraré sus habitaciones y luego los guiare a usted y su esposo hasta el despacho para una reunión con el señor. -- Asenti siguiéndolo hasta que al final de todo el recorrido, estuvimos donde nos guió, al despacho.

Pasamos en total una semana y media en esa mansión, mi padre y William durante todo ese tiempo tuvieron muchas reuniones para formular estrategias para lo que según mi rubio se avecinaba. Apesar de que Abel infunde miedo incluso con nombrarlo, me ha demostrado esa misma caracteristica que representa mi chico; cuando tienen que tratar temas del trabajo son tan temidos que no deseo jamás volverme enemigo de ellos, pero cuando están con conocidos, con la familia son tan diferentes, tan ellos mismos, tan sonrientes, y demuestran mucho sus sentimientos. Mi padre y yo hemos tenido conversaciones de pare a hijo, nos hemos conocido mucho más, nos hemos acoplado y compartido cosas que pensé que solo podría contar a mi rubio. El tiempo en la mansión fue muy gratificante.

En estos momentos estamos entrando a la casa, fue agradable el viaje mientras duró, es hora de volver a las responsabilidades y de que mi chico con ayuda de mi padre quiten a parte de sus enemigos. No soy de fan la sangre y ese tipo de cosas, es más, el hecho de estar en una relación con alguien que hace eso no me convierte en alguien que tenga sus mismos hábitos. Esto que está por acontecer además, aunque no me guste, se que debe hacerse para obtener una vida más tranquila; no quiero que Teo esté en un ambiente así, donde le toque estar corriendo o estar prevenido porque no se sabe de dónde va a salir algún enemigo que quiera acabar con él, eso no lo quiero. Todo sea por él, por mi hijo, por mi pequeño que cuando ya mayor tomara la desición de seguir o no con el legado de su padre y abuelo. Porque si, resulta que ahora William está oficialmente respaldado por Abel y sus negocios también. Ni siquiera se a que (especialmente) se dedican ambos, solo se que no es legal y no es bueno.

Esta vez estuve agradecido de que en una sola ocasión de las veces en la que Will salía todos los días, una sola vez llegó con herida. Bueno una herida como tal no, pero si obtuvo una lección de hombros que le costó días sin comandar ninguna remetida. En las noticias pasaban muchas cosa nada aptas para mí sensibilidad así que deje de verdad y estuve más al pendiente de lo que Gabriel observaba.

Catalina está en una relación con Vladimir aunque no lo quiera dar a conocer. A petición de él, se ha vuelto más fácil y se inmiscuye menos en los negocios de su hermano, ahora se la pasa "aburrida" según ella porque le hace falta acción. Debido a eso la he estado miscutenyo en mi diario vivir para mantenernos sin estrés o aburrimiento.

Acababa de tener una llamada con mi padre, me dijo que estaba planeando su tiro de gracia hacia el juez Vernon, nada relacionado con la muerte pero sacaría a la luz muchas cosas que demuestran que el hombre no es tan legal; pruebas que lo hundiran por unos cuantos años en la cárcel, ni porque intenté comprar a quienes intenten juzgarlo va a quedarse libre. Cuando Abel me dijo eso me di cuenta que el juez debe estar metido en demasiadas cosas para tener semejante enemigo y esas muchas pruebas que me comentó papá.

Tres días después me llamo papá para que viera las noticias. Y cuando prendí el televisor y fui pasando las canales y en todos los nacional estaba la noticia; y en varios canales internacionales también daban palo a esa información.

Durante cuatro malditos meses tuve soportar las faltas de mi rubio. Durante cuatro meses estuve en modo madre sobreprotectora porque según las palabras de Will las cosas estaban saliendo bien pero he aprendido que nunca se sabe lo que pueda pasar. Hubo veces en las que no lo miraba, en las que en más de una semana no lo mire porque tuvo que viajar a varios sitios del país y/o dejar la ciudad. Eso sí, mi padre había mandado hombres que daban miedo para que estuvieran al pendiente; él quiere que nos vayamos a vivir al país donde está actualmente pero no hemos encontrado una solución al problema de ocupación de Will, él a diferencia de Abel es conocido aquí y no mundialmente así que sería raro que lo administrara desde otro lugar.

En fin... estoy a estado en la cama con mi chico debajo de mí y tratamos de regular la respiración por el reciente orgasmo. Celebramos que por fin estamos libre de un enemigo potencial como lo era mi padre y ese grupo que me había raptado.

-- Will ¿Algún día me dejaras estar arriba? -- Pregunto haciendo un puchero en mi intento por conversar de algo que hemos hecho muchas veces.

-- No esperes ese día hermoso, no me hice bisexual para tener una polla en el culo, lo mío es dar y así estoy bien. -- Reí moviendo mi mano hasta su tetilla para estrujarla un poquito.

-- Ni siquiera lo has considerado. -- Me defendí.

-- No tengo que hacerlo. Seré tu eterno activo dominante y tú mi eterno pasivo sumiso.

-- Yo no soy sumiso -- Espete con el ceño fruncido.

-- Si lo eres, siempre que hacemos el amos te vuelves mi sumiso -- Con enojo lleve mi mano a su hombría semi-dormida y la apretó, se separe de el y en un rápido movimiento se gire dejando mi entrada a centímetros de la intimidad ajena. La acerque y está ya estaba despertando, no espere y me deje llenar por completo de él. Esta vez hicimos es amor y él me dejo tener el control, me dejó cabalgarlo con profesionalismo hasta que nos corrimos.





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Capitulo antes del final.

Peligroso amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora