Philips se la pasaba con su padre para estarse preparando para tomar la corona lo antes posible... incluso el asistía en algunas conferencias, reuniones o eventos públicos representando a su padre.
El Rey miraba el empeño que tenía su hijo y no negaba que ese cambio y las ganas de convertirse en Rey y de que Araceli se convierta en su esposa eran enormes.
La corte estaba siempre tras los pasos del Príncipe para vigilarlo y no cometiera un error.
- el Príncipe si sigue así se convertirá en Rey cuando cumpla treinta - le dice Alfred al Rey.
- nunca pensé que mi hijo llegará a convertirse en un príncipe responsable como lo es ahora... lo que me temo es que cuando Araceli se vaya el se convierta en la misma persona de antes.
- esa joven influye mucho en el comportamiento del Príncipe su Alteza, pero personas como ella son personas de palabra y si ella le hizo esa promesa se la cumplirá.
Araceli ya tenía casi dos meses encerrada en ese Palacio y ya estaba bien... sólo estaba esperando que Philips se fuera a una reunión con los miembros de la corte para ella poder salir del Palacio.
Philips estaba en el despacho del Rey revisando y firmando el montón de trabajo que su padre últimamente le dejaba.... Araceli estaba ahí sentada en una silla leyendo un libro... Philips de vez en cuando la observaba sin que ella se diera cuenta.
Philips tiene sus ojos puestos en Araceli... le gusta mirarla cuando esta leyendo un libro... cuando tocan a la puerta.
- pase. - dice el Príncipe sin quitar la vista de Araceli.
- Príncipe ya es hora de llevarlo a su reunión con los miembros de la corte. - le dice Alfred.
- enseguida voy Alfred. - dice poniéndose de pie. - espérame en la limusina. - Alfred sale cerrando la puerta.
- tengo que irme princesa. - le dice a Araceli quien se pone de pie para despedirlo.
- esta bien yo me iré a mi habitación invadida por ti para descansar un poco.
Salen los dos del despacho y Philips la acompaña asta la habitación.
- descansa, no se a que hora regrese así que no me esperes a cenar.
Le da un beso y abandona la habitación... Araceli observa por la ventana como la limusina sale del Palacio hasta desaparecer.
- es a hora. - dijo ella sacando las armas que tiene en la caja fuerte y las guarda en una valija... después se quita el vestido y se pone un pantalón y una blusa.
Abre el pasadizo que esta en su habitación , hasta llegar a los calabozo donde tiene escondido explosivos... sale con todo y brinca el muro y camina asta la carretera donde le hace la parada a un auto.
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UNA ASESINA EN BUCKINGHAM
General FictionSonia Salmerón, una joven de 22 años está condenada a prisión desde los 16 años por haber matado a uno de los hombres más poderosos de toda Canadá. Tras pasar 6 años en prisión siente que su condena de 25 años se le hace más larga de lo esperado, p...