Mientras Jen y yo hablábamos de nuestros problemas alguien tocó la puerta, ella fue a abrirla y ahí ocurrió todo, vino justo la persona que estuve evitando des de que vine aquí.
-¿Como quieres que te perdone? ¡Me llamaste Nerd y lo peor de todo fue que te besaste con la zorra de Tiffany! Además tienen razón, no podemos estar juntos... Tú eres popular y yo... Yo solo soy una friqui. A mi me gusta estudiar, mientras a ti te gusta salir con tus amigos y ir a fiestas. Somos dos polos opuestos.- Expliqué levantándome de la cama yendo para la puerta.
- Espera.- Corrió rápidamente y me cogió de la muñeca y me giró. Quedamos a unos 5 centímetros de distancia, se podría decir que respirábamos el mismo aire. Me puse nerviosa, mi corazón iba a mil por hora, mis mejillas ardían y no sabia que hacer. Mi mente decía que me alejará y que me fuera, pero mi corazón decía lo contrario. Quedé inmóvil, aunque quisiera no podía ni mover el meñique del pie. Él me miraba a los ojos, y yo a él. Luego bajó su mirada a mis labios, y con ello se mordió su labio inferior, con eso supe perfectamente lo que quería. Quería besarme. No, no y no. No lo iba a permitir, me iba a alejar cuando él se acercó a mi oído.- Te amo, aun que seamos polos opuestos.- Luego se alejó de mi oreja y acercó sus labios a los míos, estaban tan cerca...¡que se estaban rozando!.
"Oh por dios, por favor que alguien me salve."
En cuanto acabé de suplicar, pasó. Jennifer entró, y él se alejó de mi.
Querido dios, ¡te amo!¡Me salvaste!
Ella nos miro a los dos confundida, luego hizo una seña a Eric para que saliera de la habitación. Él obedeció a su hermana y se fue. Gracias amiga.
-Tú- Dijo señalándome con el dedo índice-, ya me puedes ir contando.- Comunicó antes de que me pudiera ir.
-Fue él. ¿Qué hora es?- Cambié de tema.
-Son las 22:00, llamé a tu casa y dejaron que te quedes a dormir. Así que.... ¡Fiesta de pijamas!- Chilló subiendo a su cama y empezó a saltar.
-¡Guerra de almohadas!- Chillé yo.
Cogí la almohada y empecé a golpearla suavemente, hasta que empecé a hacerlo bruscamente. Ella también cogió su almohada y empezó a golpearme, pero yo las esquivaba. En un momento ella se quedó distraída mirando la hora y fue el momento perfecto para darle con la almohada. Le empecé a golpear con el objeto y empezó a chillar "compasión". Yo la ignoraba y seguía golpeándole. Hubo un momento que ella parecía no respirar. Dejé la almohada en un rincón y puse mi mano donde su nariz para ver si respiraba, y no, no lo hacía. Me asuste; empecé a chillar,en cuanto ella se levantó y empezó a darme con su almohada.
"¡Hija de su madre, me asustó!. Esto no quedará así Johnson."
Pasaron unos minutos y su madre nos llamó para ir a cenar. Bajamos las dos llenas de plumas de las almohadas.
-¿Pero que os habéis hecho?- Preguntó sorprendida su madre.
-Guerra de almohadas, mamá.- Respondió ella, con una sonrisa inofensiva en su rostro.
-Ai, cuando maduraréis chicas....- Comentó su madre en voz baja.
Nos sentamos en la mesa y comimos. Su madre hacía los mejores espagueti del mundo, estaban deliciosos. Al acabar de comer sus maravillosos espagueti, subimos a la habitación. Me duché y luego Jen. Como no tenía ropa, ella me prestó ropa interior y su pijama. Luego nos fuimos a dormir, ya qué mañana había Instituto.
-¡Chicas! ¡Levantaros!- Chilló la madre de Jen.
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La Vida De Una Nerd. ©
Roman pour AdolescentsMadison Smith; la supuesta friqui del instituto. Hay muchas personas que se preguntan el por qué de ese mote, ya que ella no es fea; sino lo contrario. Se podría decir que es una de las chicas más guapas del centro y, ¿Por qué le llaman friqui? Pues...