Marca.

Solo palabras.

- ¡Maldita sea!.- Gruñó.

- Se que duele pero tengo que desinfectar la herida.

- Si no tienes cuidado juro que voy a romper tu cuello.

- Trataré de ser más cuidadoso.- El chico se sintió intimidado ante la amenaza.- Creo que deberías de ir al hospital.

- ¿Acaso estas loco? ¿Quieres que me encuentren?

- Lo digo por la profundidad de la herida.

- No te preocupes por eso.- Agitó su mano.- Ella se reconstruira pronto.

- Listo...- terminó de colocar la venda.- Iré por algo de comer para ti.

- Espera...- Sostuvo su brazo.- No tengo hambre.- Tiró del chico sentandolo en su regazo.- Solo quedate haciéndome compañía.

- Cain...- El chico suspiró.- Debes descansar...

- ¿Acaso estas rechazandome?.- Lo tomó con agresividad de la barbilla.

- Duele...- Se quejó.

- Es bueno que duela...- Cain habló entre dientes.- Así sabrás como actuar para no volver a sentir tal dolor.

- ¿Podrías soltarme?.- La voz del chico se quebró.

- Bien...- Lo empujó haciéndolo caer al suelo.- Si no quieres meterte conmigo a la cama me da igual.- Se tumbó en la cama.- De todas formas nunca has sido tan bueno como mi Zhan.

- Pues gracias a ti puede que tu Zhan a estas alturas este muerto.- Fue sorprendido por Cain quien se lanzó hacia el estampado su cuerpo en el suelo.

- Cierra la boca...- Gruñó.

- Deberías marcharte...- Sus ojos se llenaron de lágrimas.- Ya estoy cansado, en verdad estoy harto de esto, siempre vienes aquí para que lama tus heridas o cuando tu rut te ataca, siempre me utilizas y luego me dejas tirado como si fuera nada...en verdad estoy cansado.

- Dejame decirte algo...- Cubrió los labios del chico con su mano.- No importa lo cansado que estés...esto se acaba cuando se me de la puta gana.- Propinó una mordida en el cuello del chico que lo hizo llorar de dolor.- Así que tienes que soportarlo...- Se levantó.- Ahora largate y déjame dormir.

-......- El chico seguía temblando sentado en el suelo.

- ¿No escuchaste?.- Gruñó.

- Si...- Se levantó en silencio.

- Una cosa más.- Lo apuntó.- Mucho cuidado con lo que haces, si me traicionas podrás terminar peor que Zhan.

- Entiendo...- Salió a toda prisa de la habitación.

Cain observó la venda colocada en su costado derecho y maldijo al sentir el dolor punzante, también maldijo a su hermano Lei por haberle asestado aquella estocada, de solo recordar aquel momento se llenaba de ira, había bajado la guardia por un segundo y no se había percatado que su hermano ya llevaba la daga en la mano cuando se acercó.

Fue debido al enojo y la rabia de haber recibido aquella estocada que Cain clavó la jeringa en el cuello de su hermano, aquel día había sido una completa locura, Cain había desatado su ira sobre todos incluso sobre el propio Zhan.

Ahora se encontraba refugiado en el hogar de este pobre omega el cual más que su amante era un pobre objeto y ahora se convertía prácticamente en el prisionero de Cain quien trataba de evitar ser atrapado.

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Después de 24 horas inconsciente Kenta finalmente abría sus ojos, su garganta se sentía seca y amarga, era la desagradable sensación después de un largo y profundo sueño. Apretó sus ojos al sentir el dolor proveniente de su vientre en el instante que intentó moverse y fue allí como todas las imágenes de lo ocurrido llegaron a él de repente, como si fuera una filme.