Capítulo 15. Esperanza

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Así que no te preocupes, no te preocupes
Aqui estoy a tu lado, a tu ladovamos a soltarte
Esta noche! Ayer se ha ido y estarás bien
Coloca tu pasado en un libro y quema las páginas

Burn The pages- Sia

Cuando llegamos a la casa camila no estaba, pero seguramente llegaría pronto su turno acabaría en unas horas, mi tía estaba inspeccionando todo el lugar sus ojos negros se movían rápidamente por los cuadros de camila, Troye ya estaba en mi cocina buscando algo de beber, el era muy confianzudo camila odiaba eso, pero muy en RL fondo RL me recuerda a jade.

— Laur se te olvido comprar jugo — me recriminó el rubio y yo lo mire con la ceja alzada — no importa ya buscare otra cosa para tomar.

— Estos cuadros parecen hechos por un hada— la voz de mi tía me hizo voltear a verla— ellos tienen un don para lo raro y misterioso.

— No sabía que mi tía era experta en arte — cuestione y élla detuvo su mirada en mi.

— No lo soy lolo, solo tuve que aprender algunas cosas. — su voz salio en un susurro — ya sabes en mi adolecencia salí con varias hadas.

— Tía no tienes que darme explicaciones — le asegure.

— Lo se lolo, solo que... Sabes yo también quise sacarle canas verdes a mis padres cuando tenia tu edad — me sonrio lado, élla creía que esto era un berrinche.

— Lo mio no es un berrinche tía Isabelle, no quiero ser una nefilim — espete y camine a la cocina con élla detrás.

— No me exprese bien lolo, solo creo que estas tomando desiciones apresuradas, te puedes arrepentir después — su argumento era razonable pero no haría cambiar de opinión.

— No tía, no lo haré.

(....)

Luego de la charla con mi tía, me explicó como iban las cosas en idris y que tanto élla como tío Simón estan buscándome aqui, mientras yo hacia la comida élla me hablaba de todo lo habían pasado élla y mi tío para estar juntos, me parecía muy hermosa su historia, escuche la puerta principal ser abierta, seguramente es camila. Mire a mi tía que seguía inmersa en la conversación con Troye

— Si era una horrible cocinera, pero aprendí con el tiempo — relataba mi tía, escuche como camila aclaraba su garganta y todos volteamos a verla y fingí sorpresa para luego salir corriendo hacia ella

— Amor llegaste — Le dije, dejando un beso en sus labios, me regalo una sonrisa.

— Te traje un detalle, amada mia — me entrego un ramo de rosas, camila amaba las flores y me gustaban estos detalles de su parte, vi como recorría todo con su mirada.

Un amor bajo la Paz fría (Camren g!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora