18

573 71 18
                                    


La cena fue un evento bastante agradable. Entre la pizza, la cerveza, Anya y Clarke; Lexa murió a carcajadas durante toda la cena. Anya se la paso brillando. Y por brillante, quería decir inteligente. Perceptiva y conocedora. Lo cual tenía mucho sentido, desde que la castaña descubrió que Anya como consejera para jóvenes con problemas.


―Tu trabajo es muy significativo―.


La chica asiática sonrió. ―Todos los trabajos son significativos―.


―Es verdad. Pero el tuyo es muy útil ―. Lexa se miró las uñas por un momento antes de volver hacia los ojos amables de la chica asiática. ―En el pasado, recibí ayuda de una consejera. Le estoy tan agradecida―.


―¿Te importaría compartir cómo te ayudó?―


Lexa se mordió el labio. ―Me acosaron en la escuela. Fui condenada al destierro. Fue un momento muy difícil para mí, pero la consejero me ayudó a recuperar la confianza ―.


―¿Sigues en contacto con ella?―


―Si. Le envío algún mensaje ocasional. Días festivos, su cumpleaños. . . ―


Anya sonrió. ―Eso es bueno. Algunos de los jóvenes a los que he aconsejado hacen lo mismo que tú. Pero muchos otros simplemente desaparecen. No es que quiera que lo hagan. Solo espero que estén viviendo una buena vida ―.


Lexa miró a Clarke que había estado callada todo el tiempo. ―Espero que el tema no sea demasiado aburrido para ti―.


―No tienes que preocuparte por Clarke. Ella está escuchando ―. Anya levantó su vaso de cerveza. ―Un brindis por los sobrevivientes de una juventud con problemas―


Con una sonrisa, Lexa levantó su vaso y chocó con el de Anya. ―Por todos los supervivientes―.



―Gracias por invitarme. Realmente disfruté la cena con ustedes, chicas ―.


―Tienes que venir más a menudo. La cena es mucho más animada contigo. No es tan divertido cuando solo somos Clarke y yo ―.


Los ojos verdes se detuvieron en Clarke pero la cantante no pronuncio ni una sola palabra. ― Volveré si me invitan. Seguro que es mejor cenar sola y en mi pequeño apartamento ―.


―Siempre eres bienvenida a esta humilde morada―, declaró Anya con una amplia sonrisa.


―Trae cerveza y te amaremos aún más―, termino riendo.


―Habla por ti, Anya,― intervino Clarke. ―Tú eres la alcohólica―.


―Me aseguraré de ello la próxima vez―.


LA ESTRELLA DE ROCK Y LA GERENTE  (CLEXA/LEXARKE AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora