LA ESTRELLA DE ROCK Y LA GERENTE (CLEXA/LEXARKE AU)

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Una alerta Clarke, fue la que se dirigió al bar después de Anya la dejara. Tan vacilante porque no estaba segura de sí Lexa se tomaría en serio, los insultos de los que hablaron esa mañana. Un lado de su mente, se aferraba a la esperanza de que Lexa estuviera bromeando. Pero por otro lado, tenía que admitir que la castaña, no tenía miedo de llevar a cabo lo que decía.

―Hey―, saludo a Luna y Madi al entrar a la cabina.

Ambas le devolvieron el saludo y en segundos la charla inundo el lugar, mientras se preparaban para su primer set de la noche. Raven llegó poco después; hubo la misma ronda de saludos y entonces se unió a la conversación.

En ese punto, Clarke se sentía esperanzada. Tendría la oportunidad de subir al escenario antes de la llegada de Lexa. Quizás la gerente estaba ocupada siendo una idiota. O quizás se había olvidado de todo. Quizás. . .

―Hola, ¿cómo se sienten hoy, chicas?―

Las esperanzas de Clarke se desvanecieron cuando el rostro sonriente de Lexa apareció en su cabina. Las miembros de su banda le dieron a Lexa amplias sonrisas y respuestas positivas, mientras ella se mantenía muy callada en su esquina, fingiendo ser invisible. Tal vez, solo tal vez, Lexa no la vería y se iría sin avergonzarla.

Desafortunadamente para ella, no fue así.

―¡Rompe una pierna, rubia imbécil! —dijo Lexa, perfectamente audible, justo antes de salir de la cabina.

Todos los ojos se posaron en Clarke y casi gimió en voz alta. ―¿Qué están mirando?―

―A ti, rubia imbécil,― contesto Luna con simpleza. Parecía como si estuviera a punto de colapsar en una carcajada paralizante.

―Ella puede llamarme como se le pegue la gana pero no tú―.

―Lo que digas, imbécil―.

Raven cayó sobre el asiento en un ataque de risa. Madi también moría de una risa tan severa que no se podía escuchar nada más. Clarke les arrojó las bobinas de cables más cercanas y salió de la cabina, para alejarse de sus incorregibles compañeras de banda. ¡Maldita sea!.

∩

Durante toda la noche, Lexa se contuvo de irritar más a Clarke después del saludo inicial. Pero en el momento en el que la banda terminó con su último set, ella apareció en el escenario y mostró su sonrisa más brillante.