Personajes:
Los personajes son de la serie Tokyo Revengers, creada por Ken Wakui.
Las imágenes no son mías: Créditos sus respectivos autores.
Derechos de autor reservados: Estas historias (one shots) son de mi autoría, queda prohibida su copia, ada...
Ahí se encontraban los tres amigos, tumbados en una explanada con algunos árboles y vegetación. Acababan de terminar una fiesta y estaban muy ebrios.
- Oye Kisaki, hipp no beses a mi novio. - soltó Lara borracha observando la escena que presenciaba con sus ojos.
- No me digas lo que debo hipp o no debo hacer. - contestó Kisaki igual de borracho.
- ¿Celosa amor? - preguntó Hanma. Se separó de Kisaki y se acercó a Lara. - ¿Quieres que te bese? - preguntó agarrándola de la cintura.
- No quiero, me has engañado con ese. - señaló a Kisaki con cara de puchero. Antes de que siguiera hablando, Hanma la besó apasionadamente.
Tras ese beso, Kisaki se fue y Hanma comenzó a acariciar su pelo, lamer su cuello y clavículas, así hasta quitarse su camiseta y la de ella.
- Es un lugar público Hanma. - soltó no muy convencida por lo que él estaba haciendo.
- Son las 4 de la mañana, no creo que nadie nos vea. - justificó.
Lara señaló unos árboles cerca de donde estaban.
- Como ordenes mi reina. - la tomó en brazos estilo princesa y la llevó hacia el lugar ella había indicado.
- Hanma... tengo frío. - tiritó Lara.
- Tranquila bebé, enseguida te caliento. - dijo desprendiendo su falda y colocándola debajo de él. Volvió a acariciar su cuerpo, y dejando un rastro de besos húmedos llegó hasta sus bragas, así que miró a Lara. Asintió y Hanma empezó a tocar su intimidad insertando dos de sus largos dedos en ella. Una vez terminó, Hanma sacó un condón y se puso. - ¿Lista?
- Sí... sé gentil.
- De acuerdo preciosa. - dijo besando sus labios y entrando despacio y delicadamente en ella. Eso provocó unos gemidos sonoros por parte de la fémina, lo que excitó y agrandó la entrepierna de Hanma. Independientemente, él se controló y siguió avanzando de manera lenta hasta entrar por completo dentro de ella.
Hanma amaba a Lara como nunca antes había amado a nadie, ella aceptó todas sus facetas, y al darse cuenta de que había conocido a su ángel, se declaró consiguiendo salir con ella. Llevan 10 años juntos, y Hanma la sigue tratando como la primera vez, como si fuera porcelana.
Tras un sexo gentil y precioso como su primera vez, salió de ella y luego de tirar el condón, se vistió y la tomo en brazos para vestirla.
- Hanma... Te amo. - balbuceó Lara medio dormida.
- Yo también te amo mi querido ángel. - contestó besándole la frente consiguiendo formar una sonrisa en ella.
Después de un tiempo, subieron a la moto y se acostaron en su cama abrazándose.
Al día siguiente Hanma se levantó sobre las 10 y le preparó el desayuno a Lara. No se le daba bien cocinar, pero él lo intentaba solo para ver sonreír a su novia. Sobre todo, hoy se esforzó más, ya que tenía una sorpresa para ella.
- Cariño el desayuno está listo, - dijo Hanma asomándose a la habitación y despeinándola para despertarla.
- Buenos días. - saludó ella levantándose y dándole un beso en los labios.
- Vamos a desayunar. - propuso cogiéndole de la mano.
Una vez terminaron de comer:
- ¿Te casarías conmigo? - preguntó Hanma arrodillándose a su lado y extendiendo una caja de terciopelo rojo con un anillo con un diamante en su interior.
- Sí, claro que sí. - dijo ella saltando a sus brazos.
- Gracias Lara, me has hecho el hombre más feliz del mundo.
Esperoqueoshayagustado<3
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