¿Qué harías en el nombre del amor?
¿Traicionarías a tu mejor amigo? ¿Engañarías a tu novio? ¿Que tanto daño estas dispuesto hacer, en nombre del amor?
En un mundo donde las almas gemelas existen, donde hay alguien destinado para ti, dos vidas se cr...
Sacudió la cabeza "a Jimin lo violaron", las palabras retumbando en su cabeza, no podía ser posible, miró nuevamente a Sunni, la chica lo observaba con miedo — Si Hoseok, si lo que dice es verdad y tuviste algo que ver con eso — Jeon se paró y caminó hacia ella — será mejor que te escondas muy bien, porque yo mismo vendré por ti y te matare.
Dio media vuelta, y salió sin importarle nada más que llegar hasta donde está Jimin, no vio a Sunni quebrarse, no escucho los gritos de Hoseok deteniéndose, salió del establecimiento y caminó hasta su motocicleta, no vio a Kai y Seung haciendo fila, como tampoco vio que la camioneta de Taeyang seguía estacionada frente al club.
Acelero y rebaso el límite permitido, no importaba si el semáforo estaba en rojo, lo pasaba, necesitaba verlo, joder que no, no podía ser más imbécil y dudar de su chico, de su Jimin, mierda, no podía ser cierto, Lee no podía hacerle eso, no sería capaz.
Maldición que mataría no solo a Suni, mataría a Kai y Seung, lo haría con sus propias manos y luego despellejaba a Lee.
Estaciono su moto afuera de aquel edificio, tomo el elevador y marco el piso número once, su pierna no dejaba de moverse, estaba ansioso, nervioso ¿Por qué el elevador iba tan lento?, al fin llego al piso marcado y corrió por el pasillo, dio vuelta a la derecha la puerta con el número ocho lo saludo, sus manos sudaban, saco sus llaves y se le cayeron, joder, joder, sus manos no dejaban de temblar, encontró la llave y como pudo abrió la puerta.
Esperaba verlo sentado en la sala de aquel piso, viendo una película, pero no había nadie se quitó lo más rápido que pudo sus botas, camino un poco y se asomó a la cocina que lucía solitaria, no había rastro de Jimin, sintió su pecho martillar, le rogaba a la luna que estuviera bien, caminó hasta su habitación, nada, no había nadie.
Iba a llamarlo, a gritar su nombre, pero entonces la luz del baño llamó su atención, caminó hasta ahí y entonces lo escucho, escucho su llanto y JungKook se quebró también.
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Taeyang llevaba fuera quince minutos, en donde se había quedado sentado en la sala, se sentó y abrazó sus piernas, recordó su primera noche ahí con JungKook, sonrió con nostalgia, se puso de pie y caminó hasta el baño, necesitaba una ducha.
Sin mirarse al espejo, se fue despojando de su ropa, pero al dar media vuelta choco con su reflejo, marcas moradas adornando todo su torso, en su cuello aún se podían ver las marcas de asfixia, tenía quemaduras de cigarrillos por todos lados, incluso su pene, tenía una pequeña quemadura y una lesión que no recordaba como sucedió, prefería no hacerlo, parecía que todo su ser estaba maltratado, solo hubo un lugar él cuál protegió, solo había un trozo de piel sin lastimar, su pequeña constelación estaba intacta.
Levantó su vista y observó su rostro, con moretones, su ojo izquierdo apenas visible, sus labios partidos, lucía horrible, recordó las fotos que vio en el estado de JungKook "Bienvenido a casa, mi amor", así que por eso JungKook no había aparecido, estaba con ella — Ella si luce bonita, no está sucia como tú, Jimin ¿Qué esperabas? — lleno la bañera en silencio, no se miró de nuevo.
