Obito.

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Infidelidad.

/Narra Obito/

Llegué a casa de mi novia (Tn) por la mañana, pues habíamos quedado para desayunar juntos. Al abrir la puerta no escuché ningún ruido adentro, pero al entrar a la sala me encontré con una escena que me partió el alma en dos.

(Tn), mi (Tn), con la que llevo ya más de 3 años de relación está acostada en el piso... En lugar de cobija una camisa que no es mía... Junto a un compañero suyo de trabajo... Sin camisa. Hay dos botellas de alcohol vacías y dos vasos tirados junto a ellos.

Mi cabeza me quiere explotar, quiero saber qué carajos pasó pero a la vez no quiero.
No sé que hacer.

-(Tn)... ¡(Tn)!- Le gritó un poco fuerte y ella abre un poco los ojos.

-¿Mmm? ¿Obito?- Intenta enfocarme, sus manos tocando ambos lados de su cabeza seguramente con jaqueca. Al mismo tiempo el tipo a su lado se gira, aún dormido, le pasa un brazo por la cintura y una pierna por encima de las piernas de ella.

Siento una punzada de coraje, la garganta hecha un nudo. Quiero tiempo para pensar y calmarme, quiero una explicación de esto, pero sobre todo quiero golpear a ese tipo hasta cansarme y luego descansar y seguir golpeándolo.

Ella parece reaccionar luego de eso, abre bien los ojos y se incorpora, haciendo a un lado las extremidades ajenas. Luego me ve con una sonrisa, que se borra de inmediato cuando ve mi cara.

-¿Que sucede?- Me pregunta ladeando la cabeza.

¿Que qué sucede? Demonios, eso es lo que quisiera saber yo.

-Buenos días.- El tipo bosteza y se estira un poco antes de levantarse. -Cielos, pero qué bien dormí. Descansé de maravilla, (Tn) deberíamos hacerlo más seguido. ¿Eh?- Me mira.- Buenos días amigo.

Luego entra a la cocina y se sirve un vaso con agua. Yo miro a mi chica sin poder decir algo civilizado.

-Obito, él es un compañero del trabajo, ayer salimos a beber un poco y luego vinimos aquí. Yo no sé dónde vive y él no estaba en condiciones de conducir, por eso dejé que se quedará.

Ella se levanta y le entrega su camisa, él comienza a vestirse frente a mi, ella va al dormitorio a cambiarse la pijama, cuando sale trae puesta la bata que usa en el hospital. Él también se pone la suya antes de entrar al baño.

-Obito...- Me dice (Tn) mientras levanta un poco ambas manos y se acerca despacio. -Lo diré solo por si acaso... Esto no es "eso".

-¿Y qué es "eso"?- Le preguntó, no puedo creer que le haya llamado "eso".

De fondo se escucha la televisión, un programa de chismes está dando la nota de un famoso actor que fue descubierto siendo infiel a su esposa.

Otra punzada, está vez directo al corazón.

Dejó el desayuno, ya frío, sobre la mesa mientras ella atiende una llamada. Ya no desayunaremos juntos, es tarde y ella debe trabajar. En parte creo que está bien, no quiero hablar con ella en este momento. Quiero calmarme, esto seguramente es un malentendido. Tiene que serlo.

-Hola de nuevo, disculpa que no me presentara bien antes, pero ya sabes, la cabeza aún me daba vueltas. Soy Kakashi, trabajo con (Tn) en el hospital, en el área de pediatría, somos compañeros. Ella me ha hablado mucho de ti, parece ser que eres muy atento aunque supongo que tu trabajo absorbe gran parte de tu tiempo, apuesto a que quisieras estar con ella todo el día, ¿No? Pero bueno, no debes preocuparte, cuando tú no estás, la cuido yo.

Ya está, le partiré la cara.

-Kakashi.- Dice (Tn) entrando a la casa, aún con el teléfono en la mano. -Debemos irnos ya, la enfermera en turno se reportó enferma.

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