Sasuke.

1.4K 64 23
                                    

Chico raro.
**Este shot me dió asco cuando lo escribí. No lo leas si tienes estómago sensible.**

Una vez conocí un chico, era callado y no tenía muchos amigos. Se llamaba Sasuke.

Sasuke Uchiha.

A su familia le pertenecía, prácticamente, una cuarta parte de toda la ciudad. Habían levantado un gran muro alrededor, y todos los Uchiha construían sus casas ahí; ahí nacían, vivían y morían.

Por esa razón su familia tenía problemas con casi todos en la ciudad y por eso casi no salían. Algunos se habían ido lejos y no habían regresado. Otros habían desaparecido, quizás alguien había tomado venganza por mano propia.

Sasuke y yo íbamos juntos a la escuela, en el mismo grado, teníamos las mismas clases y talleres, pero no habíamos hablado hasta que nos pusieron a trabajar en un proyecto en parejas. Al inicio era obvio que él no quería, incluso habló con el profesor para hacer el proyecto solo, pero no le funcionó. No hablaba mucho al inicio pero aún así nos fuimos conociendo, nos quedabamos en el aula para hacer el proyecto, poco a poco fuimos avanzando tanto en nuestro trabajo como en nuestra amistad.

Pero había algunas cosas de él que no entendía. Nunca me compartió de su comida. No se acercaba demasiado. Varias veces lo sorprendí viendo mis manos o mis hombros. Cuando le ofrecía de mi comida su cara se desfiguraba de disgusto. Decía que no comía carne pero una vez lo ví, allá en un rincón para que nadie lo molestara, comiendo una hamburguesa.

Yo pensaba que todo era por como lo trataban, por los problemas que tenía su familia, que era retraído por los años de maltrato psicológico y el rechazo público.

Pero qué equivocada estaba.

Hasta que un viernes, al final de las clases, se acercó a mi y me besó en los labios. Fue un beso torpe, quizás el primero para él, me miró a los ojos, paso su dedo índice por mi cuello y hombro derecho y luego se fue.

El me gustaba, era serio pero bastante atractivo. Y por eso mi cabeza se nubló, me sonrojé y sonreí como tonta mientras lo veía alejarse. No miró atrás ni por un momento. Me fui a casa a pensar toda la tarde en Sasuke. En nuestro primero beso y en qué pasaría con nosotros ahora. Mis dedos rozaban mis labios, recordando la sensación de su boca sobre la mía, mi estómago se llenaba de mariposas.

Pero todo cambio al día siguiente.

Cuando desperté sentí una picazón en mi labio inferior, también me ardía un poco. Al tocar, sentía la carne levantada y mi labio hinchado. Fui al espejo del baño y descubrí que la mitad de mi labio inferior estaba rojo, hinchado y abierto, con una ligera línea negra alrededor.

¿Qué carajos me pasó?

Luego de vestirme y desayunar como pude, fui al doctor. Me hizo las preguntas básicas y luego me examinó, tomó un pedazo de carne de mi labio para ver qué podía haberlo causado.

Los resultados estuvieron listos una hora después. El doctor fue por ellos y regresó con la policía.

Me arrestaron para interrogarme y enviaron a otros policías a mi casa a buscar evidencia.

Y yo me dije: ¿Evidencia de qué? ¿De que se me acusa?

Carne humana. De comer carne humana. Y encima, en estado de putrefacción.

¿Qué?

El solo pensarlo me dió asco.

Ellos me explicaron que cuando comes carne humana en mal estado terminas con algo, bueno, algo como lo que yo tenía en mi labio.

Pero yo jamás en la vida había siquiera pensado en hacer una asquerosidad como esa.

Luego uno de ellos me dijo que también era posible infectar a alguien con la saliva.

Y ahí entendí todo.

Sasuke nunca compartía su comida. Vivía solo. Su familia "desaparecía" o se "iba lejos" y jamás regresaba. Miraba mi cuerpo pero jamás mi cara. No se acercaba a nadie. Sasuke no comía carne, al menos no carne de res. La hamburguesa... Esa hamburguesa era de...

Lo siguiente que pasó fue que hicieron el arresto más escandaloso que he vivido. No solo arrestaron a Sasuke, también a su hermano y a sus padres. Todos ellos estaban involucrados en la misma práctica. Confiscaron libros con recetas e imágenes bastante explícitas y un recipiente con carne marinada echada a perder. Encontraron a casi todos los familiares desaparecidos, o bueno, sus huesos enterrados por todas parte; hombres, mujeres y niños. Y kilos de carne humana congelada en su casa.

Cuando les preguntaron porqué lo hacían dijeron que solo le hacían un favor a la sociedad, que sus familiares eran malos pero nadie les hacía nada por miedo al resto del clan.

Hasta la fecha vomito cada vez que me acuerdo de él.

UchihasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora