16

112 8 2
                                    

— Dios, esto está delicioso.

N: ¿Lo está?

— ¡Por supuesto! ¿No haz considerado abrir un restaurante? Yo sería la primera persona en estar allí.

N: Claro que lo harías, porque tu serías la gerente.

Sonreí ante lo que dijo, el siempre sabe hacerme sonreír como una completa idiota, ¿Está permitido quererlo tanto en tan poco tiempo? Este chico realmente se ha ganado mi corazón, y no lo quiero de vuelta, deseo que se lo quede para siempre.

— Jae...

N: ¿Sí?

— Te quiero...

N: También te quiero, no imaginas cuánto.

Respondió mientras acariciaba mi cabello. Una vez que terminé de comer, limpié lo que había usado, y fui a la sala con Jaemin, no pasaron más de 10 minutos, y ya estaba bostezando.

N: Vamos a la cama, debes descansar.

— Uhm... No quiero pararme.

Hice un puchero mientras lo miraba, ante ello, él sólo rió y me cargó cómo si fuese una princesa, para subir las escaleras hacia la segunda planta conmigo en sus brazos.

— Tus brazos se ven pequeños y delgados, pero en realidad eres muy fuerte.

N: ¿Gracias?

— Quiero decir, ¿Cómo es que eres tan fuerte?

N: Ejercicio...

— ¿Qué clase de ejercicio haces? ¿Levantas camiones o qué?

N: ¿Cómo lo adivinaste?

Cuestionó mientras me sentaba en la cama con una sonrisa, ante ello arrugué mi nariz y solté una pequeña risa para recostarme en la cama. Al verme, Jaemin me cubrió con la manta y besó mi frente en forma de despedida, ante ello, tomé su mano para detenerlo de irse.

— No te vayas.

N: ¿Uhm?

— Quédate... Aquí conmigo.

N: ¿Estás segura?

— Sólo ven y abrázame.

Jaemin ladeó un poco su cabeza antes de ceder y recostarse a mi lado abrazándome a su pecho, realmente estaba viviendo como en un sueño luego de aquella horrible pesadilla que había pasado en esa mansión... Jaemin me hacía sentir como en casa, me daba la paz que necesitaba, pero por alguna razón, sentía que aquello no sería eterno cómo nos habíamos prometido, por lo que deseaba pasar todo el tiempo posible a su lado en caso de que algo nos alejara.

Al día siguiente.

— ¿Por qué este hombre es tan guapo?

Me cuestioné a mí misma mientras acariciaba el cabello de mi, ahora, novio. Segundos después, este abrió sus ojos mirándome fijamente para esbozar una hermosa sonrisa.

— Basta, eres demasiado guapo, acabarás con mi cordura, Na Jaemin.

N: Te ves aún más linda cuando acabas de despertar.

— ¿Ah, sí? Ya me lo habían dicho, pero gracias de todas formas.

N: ¡Eh!

— Sólo bromeo, eres al primer chico al que no lanzo al suelo mientras duermo.

N: ¿Debería estar feliz por ello, o debería preguntar quienes fueron los anteriores?

— Byun y Jackson... Viven juntos, y hace un tiempo su casa tuvo una fuga de agua en las tuberías, así que se quedaron conmigo en lo que reparaban el problemilla. Un día Byun dormía en el sofá y Jackson conmigo, y al otro, ellos cambiaban de lugar.

N: ¿Qué clase de amistad tienen ustedes? ¿Acaso están en un Poliamor?

— Claro que no, tonto. Somos tres mejores amigos que tienen demasiada confianza entre ellos, prácticamente somos hermanos, jamás se me pasaría por la cabeza salir con alguno de ellos, mucho menos con Byun.

N: ¿Por qué Kang Byun no?

— Porque es la primera persona que conocí aquí, es realmente familia para mi, ya sea un primo, un hermano, e incluso un padre, el es todo eso para mí, jamás me ha interesado de otra forma, sólo es familia.

N: ¿Qué hay de Jackson?

— Bueno, es lindo, pero también es familia para mí, Byun y Jackson fueron las personas que mas apoyo me han dado en el tiempo que llevo siendo policía... Además, ya hay alguien que me gusta, ¿Por qué analizar a mis amigos ahora?

N: ¿Hay alguien que te gusta? ¿Puedo saber quien es?

— Su identidad es secreta, lo siento... Pero puedo decirte que es realmente guapo, y me hace muy feliz, me cuida mucho, me hace comida realmente deliciosa, e incluso se preocupa de que esté bien. Es el novio perfecto.

N: Por como hablas de él, tu novio debe ser realmente genial.

— Lo es... Aunque cuando no se arregla el cabello parece un león.

N: Mira quién lo dice.

— Tsh...

Entrecerré mis ojos y reí con levedad para besar su mejilla y luego apoyar mi cabeza en su pecho mientras lo abrazaba con suavidad.

N: Supongo que ya lo sabes, pero te amo... No quiero que me dejes.

— No te dejaré, lo prometo, siempre estaré a tu lado.

N: ¿Sin importar qué?

— Sí... Sin importar qué, permaneceré a tu lado, da igual lo que ocurra en el futuro, me quedaré contigo hasta el final... Incluso si todo el mundo se vuelve en nuestra contra, estaré contigo.

N: Entonces, puedo quedarme en paz.

— Jaemin...

N: ¿Sí?

— También te amo.

Tras decir aquello le miré a los ojos, tan sólo ver su sonrisa me volvió la chica más feliz del mundo, sí, me había enamorado del chico que estaba obsesionado con los video juegos. Había dicho que jamás perdería mi tiempo saliendo con un gamer, pero aquí estoy, a su lado, prometiendo estar allí por siempre, ¿Está bien hacer eso? Quiero decir, él tiene a un pequeño del que cuidar, añadirme a la bolsa es un poco... Complicado... Temo arruinar todo para él y su pequeño hijo, pero de alguna forma también me emociona el tener un novio que cría a un niño, ya que de esa forma, puedo admirar lo buen padre que será en el futuro con sus hijos biológicos, y espero ser yo quién traiga al mundo a esas criaturas.

𝐎𝐛𝐬𝐞𝐬𝐬𝐢𝐨𝐧 [ɳα ʝαεɱเɳ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora