NEUROSIS

XIV

UNA NOCHE PELIGROSA

...

No tenía mucho ánimo de participar del evento en el museo, lo hice por acompañar a Oli que estaba muy emocionado, él sabía que Agne iba a estar allí como casi todo TADEIM, también decidí ir por la alta calificación que tenía en filosofía.

Merry se ofreció en maquillarme, no estaba muy segura de que fuera buena idea, pero ante su constante insistencia accedí ¿qué podía salir mal? Cuando terminó me mire en el espejo y me costó reconocerme, el vestido negro era ajustado y hacía notar mi figura, aunque estaba un poco más delgada, no me veía tan mal. Decidí hacer una coleta alta en mi cabello, Merry me regalo uno de sus collares y mi cuello se veía bastante estilizado.

—Ann te ves completamente hermosa —Merry me miraba satisfecha —Sí que se hacer magia.

—Gracias Merry, claro que tu estas más hermosa que yo.

—Eso no lo pienso discutir, —esta sonrió ampliamente, tomo uno de sus perfume y aunque me negué, me vacío casi todo el frasco.

—Oli fue por mí, se bajó del auto y me abrió la puerta como todo un caballero —Pero que hombre tan guapo —exprese guiñando un ojo.

—Este se sonrió con pena —gracias, tengo que verme bien, puede que Agne este por allí hoy.

—Es lo más seguro, y créeme que la dejaras muy impresionada.

—Y tu mi reina estas de impacto, cuando te vi salir del departamento se me vino un pensamiento con el que podría condenarme —nos reímos por un momento, Oli sin duda se había convirtió en el toque divertido que le faltaba a mi vida.

—Eres un pasado.

— ¿Me dirás porque tienes los ojos tristes? Aunque luces como toda una diosa, sé que algo te pasa, ¿es por Riko?

—No vale, lo que pasa es que no estoy acostumbrada a vestir así, este tipo de cosas no me animan mucho —dije encogiendo los hombros.

—No me mientas Ann.

—Te estoy diciendo la verdad —sonreí con los labios cerrados — Vamos, no quieres llegar tarde, mira que Agne de seguro ya está allá.

—Tienes razón, es noche para brillar.

Llegamos y todo era muy elegante, había un joven que me abrió la puerta del auto y Oli entrego sus llaves para que este lo parqueara, las chicas iban con traje de Gala, más bien parecía una entregar de Oscar. El ambiente para mí era completamente incomodo, en el aire se percibía una infinidad de perfumes, uno más caro que el otro.

Oli me tomo del brazo y avanzamos, antes de entrar pidieron nuestras identificaciones, validaron algunas cosas y nos marcaron como asistentes, imagino que la profesora con eso sabría que estuvimos allí.

—Oli, no traje mi cámara, la olvide por completo —Sonreí con travesura.

— Ann, da gracias a Dios que no olvide mi teléfono, tomemos unas cuantas fotos de nosotros y ya.

Eso hicimos al principio, luego haríamos el recorrido para poder tener otras fotos para el informe. Todo dentro del museo era completamente elegante.

—Este año le pusieron más esmero —Comento Oli, Observando el lugar.

—No sé qué tan bueno fue el año anterior, pero jamás imagine que iba a ser así —Oli me freno de golpe y cuando lo vi estaba pálido.

— ¿Qué te pasa? ¿Te sientes mal? —le pregunte tocando su cara fría.

—Allí esta ella —dijo tartamudeando.

Cuando mire al frente estaba la famosa Agne, realmente estaba radiante, traía puesto un vestido blanco largo, que la estilizaba y mostraba toda su figura.