—Él te arrebató tu identidad y tu futuro, es natural que lo odies.
—Jamás lo había pensado así, yo no elegí ser "Rami" pero tampoco sé quien más podría ser si no soy "Rami".
—Eres Ayse, mi sultana. La única esposa del Sultán del Imperio Otomano y la futura madre del príncipe de la corona.
¿Sultana? ¿Puedo ser sultana? ¿Puedo amar a este hombre y por fin tener la vida que se supone que debía vivir? ¿Podré vivir como una mujer si me quedo aquí? Pero si me quedo aquí estaré atrapada y no podré volver a salir ¿debería quedarme aquí?
—¿Podré irme después de darle un hijo?
—¿Abandonarías a tu hijo aquí y te irías?
—Yo... No. Jamás podría hacer eso, si tengo un hijo entonces jamás dejaré este palacio.
El sultán sonrió al escuchar mi respuesta, me tomó por la mejilla y me acercó más a él.
Sentí su respiración en mi rostro, su nariz rozó con la mía y cuando estaba a punto de besarme, tocaron la puerta.
—¿Quién se atreve a interrumpir al Gran Sultán del mundo? —habló un irritado Sultán.
—Me disculpo su majestad, pero el Gran visir solicita una audiencia con usted y dice que es de suma urgencia —respondió uno de los guardias desde afuera de la habitación.
—Dile que iré en un momento.
—El gran visir también me informó que el gobernador de Anatolia quiere hablar con su majestad.
—Dije que iré en un momento.
—Sí, su majestad —respondió el guardia desde el otro lado de la puerta.
Mi padre estaba aquí en el palacio ¿habrá venido por mí? Tal vez ha venido a pedirle al Sultán que me quiere de vuelta. Es posible que mi padre no me haya abandonado del todo, él todavía me necesita.
—Puedes volver al harén. Reyhan te mostrará tu nueva habitación y prepárate, porque volveré a llamarte esta noche —dijo el Sultán antes de levantarse de la cama.
—Me retiro, su majestad —salí de la habitación del Sultán y me dirigí al harén.
Reyhan me vio y se apresuró hacia mí, las demás mujeres del harén me miraban con desprecio y luego giraban la vista para ya no verme más.
—Ayse, te llevaré a tu nueva habitación. Ahora eres una favorita del Sultán y vivirás con las demás favoritas.
Reyhan me guió hacia unas escaleras y subimos al segundo piso. Había varias mujeres que estaban paradas en el balcón, mirando hacia abajo con superioridad.
—Recién llegó y ya fue favorecida por el Sultán, veamos cuanto puede sobrevivir aquí —comentó una de las mujeres. Tenía el cabello rubio y ojos verdes, parecía ser extranjera. Escuché que en el harén hay mujeres de diferentes países.
—Señorita Zeynep, por favor trate bien a la señorita Ayse. Ahora ella es una más de las favoritas de nuestro Sultán. Además, el Sultán a pedido por ella está noche también y debe estar en perfectas condiciones para servir al Sultán —le dijo Reyhan a aquella mujer rubia y de ojos verdes.
—Sí, Reyhan Kalfa —le respondió Zeynep.
—Esta es tu habitación desde ahora y la compartirás con Zayan. Quiero que ambas se lleven bien o las castigaré severamente —dijo Reyhan antes de irse.
La habitación era espaciosa y limpia, había dos camas y baúles al pie de las camas. Al otro lado de la habitación había una pequeña mesa y un gran sofá, también un pequeño estante con libros.
Una mujer estaba sentada en la cama leyendo un libro, tenía el cabello castaño claro y unos oscuros ojos negros.
Reyhan salió de la habitación y me dejó sola con Zayan, ella dejó su libro a un lado y se levantó, caminó hasta mi y me examinó con la mirada.
—Mi nombre es Zayan, tu debes ser Ayse ¿verdad?
—Sí, pero ¿Cómo sabes quién soy?
—Sería raro que no te conociera, todo el mundo habla de ti. La mujer que cautivó al Sultán en un día.
Ni siquiera tuviste que ser una criada, pasaste de frente a ser una concubina y quien sabe, tal vez pronto deba llamarte "mi sultana".—No pienso quedarme mucho tiempo, mi padre vendrá por mi y me llevará de regreso.
—Solo tienes tres maneras de salir de aquí. La primera y más fácil, es que el Sultán te libere. La segunda es que seas expulsada del harén y te envíen al viejo palacio. Y la tercera opción es salir muerta, sólo tu cadáver saldrá de aquí.
—Será la primera opción, el Sultán me dejará ir porque mi padre ha venido por mi.
—Qué niña tan ingenua eres ¿Crees que el Sultán te dejará ir tan fácilmente? Escuché que pidió que vayas con él esta noche, es evidente que le interesas y que no te dejará ir.
Ella tiene razón, el Sultán no iba a dejarme marchar tan fácilmente y tal vez mi padre no vino por mi.
Mi padre, que prácticamente me regaló al Sultán ¿me abandonaría otra vez?
Pasaban las horas y mientras me arreglaban para volver a ver al Sultán, me sentía abandonada nuevamente.
Mi padre no vino por mí, él me ha dejado a mi suerte en este palacio. Ya tiene a su heredero, ¿Por qué se preocuparía por una hija que no le sirve para nada? Para él solo soy una herramienta que lo ayudó a mantener la herencia de nuestra familia.
En nuestra familia, mi abuelo tuvo tres hijos. Mi padre es el hijo mayor, él y sus hermanos competían por ser el sucesor de mi abuelo. Mi abuelo les dijo a mi padre y a sus hermanos que el hijo que le diera su primer nieto sería su sucesor, heredaría su fortuna, sus territorios y sus negocios en diferentes lugares del imperio, junto con la influencia que nuestra familia tenía en el imperio.
Mi padre se casó con mi madre, porque su familia era igual de influyente que la suya. Cuando nací, mi padre estaba muy molesto, yo era la primera nieta, pero no era un varón. Me encerró junto a mi madre hasta que se le ocurrió la idea de que yo sería su "hijo" hasta que al fin naciera un verdadero sucesor.
Mi padre me presentó a mi abuelo como su hijo mayor "Rami", me llamó así en honor a mi abuelo. Siempre fui cercana a mi abuelo, él era el Gran visir del Sultán Mustafá II y me llevaba a Edirne con él cuando tenía reuniones importantes.
Conmigo, mi padre aseguró su posición como heredero de mi abuelo y se ganó el puesto de gobernador de Anatolia. Él me envió a estudiar para convertirme en "juez" y así ingresar en la política, justo como todos los miembros de nuestra familia.
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Aquí les traigo un nuevo capítulo 😌 he decidido que actualizaré una vez a la semana debido a que estoy estudiando y puede que el capítulo de la siguiente semana tarde un poco, tengan paciencia 🙇♀️
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La Mujer del Sultán
Historical FictionTodos queremos tomar nuestras propias decisiones sobre nuestra vida, lo mismo quería yo, pero el destino me hizo una mala jugada e hizo que alguien más decidiera mi futuro por mi. Fui obligada a pagar por un error que cometió mi padre y me entregaro...