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Clara estaba convencida que podía hacer esa simple tarea sola. Era ir al mercadotroll a ayudar en la búsqueda de un libro para un trabajo que debían hacer y que no tenía idea como.

—Iré por el portal, es rápido y menos peligroso.— insistió.

—¿Segura? Es que la última vez usaste mucha magia para mover mucho por un portal, no lo se Clara.— preguntó preocupado Jim.

Tenía razón, la última vez que abrió un portal para mover una gran masa de gunm gunm la joven bruja casi perdía la vida, sin embargo ella no tenía seguir usándola.

—Descuida Jim, esta bien ¿Si? Es mejor no perder la costumbre, esto me ayuda.—  respondió con una suave tono de voz para poder despreocupar a su novio, quien venia siendo presionando por todos lados.

Luego de un fugaz beso, el joven cazatroll la vio desaparecer por las sombras.

Arabella dormitaba de alguna forma, trataba de no hacerlo muy seguido puesto que perdía la noción del tiempo y temía que así también perdiera su conciencia. Dormir en ese lugar era ir a algún recuerdo y quedarse ahí, olvidarse de todo fuera de las sombras.

Despertó con brusquedad al sentir que el espacio se abría, entonces la vio otra vez. Como pudo corrió hasta ella, sino podía derribarla entonces la atravesaría, Clara debía verla de alguna forma.

—¡Bruja, aguarda!— grito mientras atravesaba el cuerpo de la castaña.

Clara se freno de repente, viéndola con sorpresa a Arabella.

—¿La chica del café?

—Si, si soy, bueno soy mas que eso.— respondió apurada.—No hay tiempo para presentaciones debes ayudarme a salir de acá, debes ir con mi compañero, Hisirdoux, y Zoe.

Los ojos de Clara trataban de seguir a la bruja que caminaba apurada de un lado a otro diciendo un plan sin sentido al que no le podía prestar atención.

—He soñado contigo.— dijo haciendo que Arabella se frenara.—¿Qué ocurre?

—Soy la hija de Morgana, si eso responde a tu pregunta, ella posee mi cuerpo, le debes decir eso a Hisirdoux.— dijo seria, tratando de tomar a Clara por ambos lados de sus hombros.—Si no salgo de acá, todo va a empeorar allá afuera, debes cuidar de esa vara.— señaló con la mirada el objeto en cuestión.—No dejes que me acerque hasta no salir de aquí.

—Pero...

—Debes insistirle, estoy segura que no te va a creer nada de esto.— le interrumpió.

A pesar de no poder llorar en ese plano sus ojos se cristalizaron pensado que por otra equivocación suya todo se podría acabar mas pronto de lo pensado.

—El collar con la piedra verde es mi ancla, estoy segura que ahora no esta funcionando gracias a Morgana.— le explicó, mientras sentía que su ojos se cerraba.—No me queda mucho tiempo, confió en ti, bruja.

Sus ojos se cerraron por un instante asustado a Clara que le grito para que volviera en conciencia.

-Maldición.- se dijo así misma.-Esta bien, quizás este en otro recuerdo cuando vuelvas por mi, pero no tardes, por favor.- dijo a modo de suplica, esbozado una sonrisa.

Tras sus últimas palabras, un portal la expulsó de ahí. Cayo sentada en el suelo de la biblioteca dónde estaba Blinkous, el troll de múltiples ojos, al igual que brazos.

Clara lo vio, tratando de formular una oración coherente la cual explicaría lo recién vivido.

—Creo que la hija de Morgana esta en peligro.— fue lo único que pudo decir. —El mundo esta en peligro.— agregó.

El destino de una bruja. [Tales Of Arcadia, Au. Douxie X Oc]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora