—¿Q-Qué? –sus ojos abiertos luciendo perdidos me hacen sentir mal por no haberlo dicho antes, por causar esta duda.—Dije que estoy enamorada de ti –repito, —te amo Mason Martins, con todo de mí y sin ninguna duda, te amo.
—Cristo, ojitos –exhala y me abraza con fuerza, siento su corazón latir con tanta fuerza que puedo sentirlo contra mí, al igual que el ligero temblor que emana su cuerpo, —me has asustado como la muerte –su voz se corta y me abraza con más fuerza, —creí que ibas a terminar conmigo –mi ceño se frunce y me alejo para verlo confundida.
—¿Qué? ¿Por qué?
—Creí que al ver lo serio que era sobre nosotros te asustarías, que al notar como estoy haciéndote parte de mi vida a este nivel te haría querer salir huyendo –siento la culpa instalarse de nuevo en mí, —sabía que estabas enamorada de mi pero aún no lo decías por alguna razón, creí que esa razón era miedo a compromiso y entonces yo prácticamente te mostré como se verá nuestra casa en un par de meses cuando finalmente te pida que te mudes por supuesto después de darte el anillo y marcar la fecha de nuestra boda pero aun así.... –me río.
—No le tengo miedo al compromiso Mason, no te dije te amo antes porque se sentía como decir "yo también" a todas las veces que tú lo dices, estaba esperando un buen momento, un momento que me hiciera dejarte sin palabras justo como tú lo hiciste conmigo.
—Bueno, pues estuviste incluso a punto de dejarme hasta sin bolas así que supongo que lo hiciste –refunfuña haciéndome reír de nuevo.
—Lo siento, se suponía que sería más romántico que esto.
—Afortunadamente puedes decirlo de nuevo para compensarlo –dice y sus manos toman mis mejillas, —ahora –agrega cuando ve que no digo nada y me río.
—Te....ngo hambre, vamos a desayunar -me escapo de su agarre y corro a la mesa. Es entonces cuando caigo en la hora que es. Ocho con veinte. —mierda.
—Toma el desayuno, te llevo yo para que puedas tomarlo en el camino -dice cuando él lo nota y después de gritarle un adiós a Olivia que se encuentra peleando con las cortinas de la ventana me apresuro hacia la puerta con Mason llevando mi bolsa por mí.
****
—Gracias –digo cuando llegamos frente al jardín, reviso mi rostro en el espejo para limpiar cualquier resto de desayuno y tomo los chicles de menta que me ofrece.
—Traeré tu coche cuando entre a mi turno en la estación –asiento.
—Y mi maleta por favor, allí tengo el traje que utilizaré el miércoles.
—Está bien.
—Dejaré a Olivia en casa.
—Está bien, puede quedarse una semana con su padre –bromeo pero él no se ríe, —eh... me voy ahora antes de...
—¿Soy el padre? –pregunta y me río.
—Bueno no, dado que ella es mi hija serías sólo el padrastro pero...
—Fue mi hija antes que tuya –se queja y me rio.
—No, nunca lo hiciste oficial así que...
—Soy su padre –dice con firmeza, —tú la mamá y yo el papá –sonríe, entonces su rostro se vuelve serio. —Tienes un hijo mío –repite, —fuera matrimonio.
—En la actualidad no hay tanto problema –me río.
—No, mis padres me enseñaron mejor que esto, tengo que ser responsable –se gira para mirarme y sus ojos brillan traviesos, —cásate conmigo ojitos, no podemos criar a nuestro fruto del amor en unión libre, ¿qué van a pensar sus amigos?
—Oh, ¡cállate! –lo empujo y comenzamos a reír, reviso la hora en la radio, ocho cincuenta y dos, adiós al personaje de hoy, —necesito entrar ahora –asiente, se inclina y besa mis labios. Bajo de la camioneta y camino hacia la entrada.
—¡PIENSA EN LO DEL MATRIMONIO! –grita llamando la atención de los padres que se encuentran dejando a sus hijos. Maldigo en voz baja y corro hacia él.
—¡Cállate! –me quejo alarmada, —podrían pensar que estás hablando enserio –sonríe, —vete ahora, nuestra hija está sola y es peligroso –me río y corro de regreso a la entrada. Asiento a forma de saludo a los padres antes de dirigirme directo a mi salón.
****
—¡¿TE VAS A CASAR CON MASÓN?! –el grito de Brianna me hace saltar y deformar los dedos de Mike Wazowski.
—Bueno, buenos días también para ti –me quejo. Había esperado que la noticia corriera y a decir verdad que tomara todo un día me había parecido un verdadero récord. El día de ayer estuve todo el tiempo en guardia sin razón pues nadie parecía ser consciente de nada, hasta hoy.
—No intentes desviar el tema hacia una charla de modales Elizabeth Walton, dime ahora, ¿es verdad?
—No, no me voy a casar con Mason.
—¿¡LE DIJISTE QUE NO!?
—No, no le dije que no porque ni siquiera me lo preguntó.
—¡No me mientas mujer! Muchas personas lo vieron, en la entrada –señala con su dedo para dar más énfasis y credibilidad, me carcajeo.
—Ellos no vieron nada Brianna, y lo que escucharon fue solo una broma, él solo estaba jugando.
—¿Lo estaba?
—Bueno, dado que hablamos de cómo Olivia era nuestro hijo fuera del matrimonio estoy cien por ciento segura de que solo era una broma para molestarme por auto proclamarme madre de un gato y debatir sobre la paternidad real o por relación que él tenía sobre ella –su ceño se frunce.
—¿Qué?
—Exacto, no tiene sentido, solo estábamos jugando.
—Eso apesta –suspira y recarga su trasero sobre mi escritorio, —en el pueblo ya están preparando tus regalos de boda –abro los ojos alarmada, —buena suerte desmintiendo tu compromiso –me sonríe burlona y se gira saliendo del salón.
****
—Hasta mañana Directora –me despido de mi jefa y camino fuera en busca de la familiar camioneta pero no logro encontrarla.
—¿Elizabeth? –una voz masculina me hace girar a mi derecha, un chico en traje se acerca a mí e inmediatamente retrocedo un paso. Su ceño se frunce por mi reacción y entonces lo reconozco.
—¿Steven? –una sonrisa se dibuja en sus labios y se acerca de nuevo.
—Creí que no te acordabas de mi –dice divertido, —lo cual habría sido incomodo cuando he venido hasta aquí para tener una cita contigo.
—¿Qué?
—¿Qué?
Mi cuerpo entero se tensa ante el sonido de la tercera voz.
——
Todos sabemos que no es una historia mía sin un poco de drama so... get ready y'all 💖
—N
ESTÁS LEYENDO
ENAMÓRATE DE MÍ
RomanceObra registrada en safre creative. No. de registro: 2110059445023 Todos los derechos reservados ©2021 Prohibida su copia o adaptación