Voluntad || Bakugou y Tú

『Capítulo 07』

Paso tras paso rápidamente me apresuraba para llegar a mi destino hasta detenerme frente al umbral de la puerta; esperando la autorización para pasar después de golpear suavemente en repetidas veces.

Una vez me fue concedida me adentre en la habitación observando de reojo como el príncipe se encontraba tomando sus clases y haciendo caso omiso fui directamente justo al lado de la institutriz transmitiendo le el mensaje que me fue encomendado suavemente en el oído.

-.Majestad, esto será todo por hoy, seguiremos en otra ocasión.- Haciendo una reverencia se retiro de la habitación dejándonos solos.

-.¿Algo de lo que deba estar enterado?.-

-.Sus padres solicitaron su presencia en el comedor.-

-.Cualquier cosa será mejor para no seguir con estas cosas.- Eso lo dijo cerrando los libros de su escritorio.

-.No creo que sea mejor.-

Nos encaminamos al comedor donde encontramos a la pareja real entablando una conversación con dos damas que a penas llegar se percataron de nuestra presencia. Ni siquiera una reverencia, simplemente llego y tomo su lugar junto a su madre, quedando de frente a las mujeres las cuales no apartaban la mirada de enfrente.

-.Mitsuki, Katsuki.- El rey tomo la palabra, el ambiente se había vuelto tenso desde que llegamos -.Déjenme presentar les a la archiduquesa Genoveva y a su hija Amelie.-

-.Es un honor conocerlos majestades.- Dijeron al unísono inclinando sus cabezas, recibiendo el mismo gesto por parte de madre e hijo -.Les agradezco el habernos permitido esta visita.- La dama tomo la primera palabra; cabello castaño y ojos dorados, un maquillaje precioso y su vestido era recatado pero a la vez elegante; está mujer reflejaba con altos lujos su título.

-.¿Cuantos años han pasado?.-

-.18 años, fue casi una eternidad. Incluso dejaste crecer tu bigote.-

-.A Mitsuki le gusta, no se me ve tan mal.-

-.Pero claro que no.-

-.Me alegra saber que no existen asperezas entre nosotros.-

-.Eso ha quedado en el pasado aún así lamento rotundamente no haber podido asistir a tu boda.-

-.Tenias tus razones pero no te preocupes. Katsuki ¿por que no llevas a Amelie a dar un recorrido?.- Se quedo en silencio por unos segundos para ponerse de pie y caminar a la puerta, parando a unos cuantos centímetros del umbral y abrirla esperando por la señorita. Al contrario de su madre ella portaba un brillante color dorado tanto es sus ojos como en su cabello, su piel era clara y la figura que se ceñía al vestido era delicada, era al apariencia digna de toda una princesa. 

La sala quedo inmersa en la conversación, hora tras hora ambos se ponían al día con la vida del otro todo el ambiente era ligero sin no contábamos lo tensa que se veía la reina, a simple vista se notaba la incomodidad que emanaba. 

No fue hasta que una risa se hizo presente en la sala dejando ver como los jóvenes habían regresado percatándose todo el mundo que la dueña de esa risa era la señorita Amelie, el rosto del príncipe era tranquilo, esa joven debió causarle una buena primera impresión. 

-.Me alegra que se estén llevando bien.- 

-.Katsuki es bastante recatado y selectivo en lo que a socializar nos referimos pero es bueno que hayan podido congeniar.-