Voluntad || Bakugou y Tú

『Capítulo 10』

El día brillaba, el aire era fresco, los pájaros cantaban y la familia real gozaba de su desayuno sin preocupaciones o eso me hubiera gustado decir. La puerta del comedor se abrió de par en par dejando ver como la archiduquesa Genoveva entraba extasiada con un periódico en la mano siendo seguida por Amelie. 

-.Buenos días majestades, lamento interrumpir pero me complace ser la primera en traerle tan grandiosas noticias.- 

-.Tranquilízate Genoveva, para que te encuentres de tan buen humor en verdad de ven ser grandiosas.- 

-.Como no estarlo después de enterarme de que el príncipe a sido visto cortejando a mi preciosa hija durante el último baile.- 

-.¡¿Que?!.- Por un momento me pareció ver al príncipe atragantarse con un bocado mientras que la reina parecía todavía tratar de asimilarlo y yo pues intentaba no ahogarme con mi propia saliva.

La mujer le extendió el periódico a su majestad el rey señalando le precisamente el artículo que le generaba tanta emoción. 

La velada conmemorativa por el regreso del heredero al Ducado Stolan, el Duque Sirius Stolan fue totalmente un evento memorable a la vista de los presentes. La presencia de su majestad el príncipe heredero en dichoso evento ha dado de que hablar no solo gracias a su asistencia sino al ser visto en los jardines adjuntos en brazos de una misteriosa dama.

 Un baile de marcarás sirviendo como una maravillosa oportunidad para la mas reciente pareja de poder aparecer en público pero la innegable duda nos inunda ¿Quien era esa dama tan afortunada? 

Los testigos afirmaban no conocerla, lo único que podían atestiguar era ese despampanante cabello rubio perteneciente a una cierta dama de sociedad ¿Será la Archiduquesa Amelie Moldovan quien tenga a nuestro futuro rey suspirando de amor? ¿Podremos esperar ya a una futura nueva princesa? 

-.Esta es una gran oportunidad Masaru.- 

-.Pero no crees que están apresurando las cosas, digo no pienso asumir alguna calumnia sobre tu hija pero Katsuki ¿Tienes algo que decir?.- 

-.Que perdí el apetito, si me disculpan o no yo me retiro.- Se levanto de la silla azotando su servilleta en la mesa. Tan pronto como salio de la sala fui tras de el esperando que no cometiera alguna imprudencia. 

-.Majestad debe tranquilizarse... ¡Deje eso!.- Rápidamente me acerque para quitarle de las manos un jarrón dorado que había tomado de los pedestales. Ni loca dejaría que lo arrojara por la ventana. 

-.Todo esto es tu culpa.- 

.¿Perdón? ¿Cómo iba a saber que esto se volvería noticia?.- 

-.Esas ratas están por todas partes.- Por ratas sabia que se refería a los reporteros pero tenía razón. 

-.De todas manera sabe como es la prensa escandalosa, les encanta distorsionar la información.- ... -.Además serían unos pésimos reporteros si para identificar a alguien se basan en su color de cabello.- 

-.Y lo son.- 

-.Duquesa Amelie.- 

-.Pero como es el príncipe heredero de quien estamos hablando no les paso por a cabeza que pudiera ser una plebeya cualquiera y simplemente tomaron a la primera noble que tuviera cabello rubio.-