Voluntad || Bakugou y Tú

『Capítulo 24』

Los dos días pasaron volando como el viento, faltaban solo dos horas para que se ocultara el sol y solo me preguntaba qué otra descabellada aventura tendría preparada para sacarme de mi rígida rutina.

—¡Ya llegué!

Cuando quité mi mirada de la ventana y la dirigí a la entrada de mi oficina; las puertas estaban abiertas de par en par, mientras que Yaoyorozu caminaba rápidamente hasta plantarse enfrente de mí.

—Vine tan pronto recibí tu mensaje. Apenas puedo creer todo lo que escribiste en ese papel, por eso necesitaba escucharlo de tu propia boca, ¿Es verdad?

—Es verdad.

—¿Cada palabra?

—Cada palabra —Reafirme.

—Y-yo... creo que necesito sentarme un momento —Dijo, palmeando el aire hasta encontrar el reposabrazos de uno de los sillones frente a mi escritorio —T/N, él es un monstruo.

—Ya se lo he dicho; Solo lo están malinterpretando. Si, a veces puede ser un patán, pero cuando estoy con él, me genera una sensación algo extraña.

—¿Cómo cual?

—Es como... Esa sensación, ya sabe, esa que te genera un... ¿comprende?

—No, la verdad es que no lo comprendo.

—Es como una calidez que se genera en el centro de mi pecho.

—Y pensé que sería yo la de las frases cursis.

—Estoy hablando en serio.

—Yo también estoy hablando en serio. Digo, no lo conozco y sé que estoy haciendo mal en basar mi opinión sobre él a base de lo que dice la gente, pero solo me preocupo por ti.

—Le agradezco la preocupación, pero le pido que confíe más en mí. Por ahora, solo espero contar con su apoyo en esto.

—Y lo tendrás, sobre todo en lo que llevarás puesto. No voy a permitir que pongas un pie fuera de este palacio usando una bata de dormir.

—Lo lamento pero cuando me pidió saltar por la ventana, no me tomé el tiempo para buscar algo más decente en mi guardarropa.

—Entonces, permite que me encargue de lo que te pondrás esta noche. Si piensas volver a saltar por una ventana, esta bien, pero esta vez, lo harás luciendo fabulosa —Se puso de pie de golpe y mostrándome una sonrisa que además de reflejar lo emocionada que se escuchaba por ser parte de esto, también me generaba escalofríos.

—¿Qué?

—Señores —Alzó las manos y dando dos aplausos, un par de hombres entraron a la habitación, rodearon mi escritorio, cada uno me tomó de brazo y separando mis pies del suelo, me llevaron fuera de mi oficina, con Yaoyorozu guiándolos al frente.

En la mayor parte del trayecto solo deje que me llevaran a donde sea que ella pensara llevarme, realmente no estaba prestando a mucha atención a lo que me decía, mi mente dejo de funcionar después de escucharla cuestionarse qué tono de sombras para los ojos se me verían mejor o que peinado logra enmarcar mejor mi rostro.

—Momo —Escuche su voz pronunciar ese nombre más adelante —¿Sabes si T/N está en su oficina? Necesito que me dé su opinión respecto a un... —No lo había visto hasta que pasamos juntos él, notando cómo se quedaba observando la escena.

—¿Mi opinión respecto a que? —Pregunte sin voltear.

—¿Me pueden explicar qué está pasando? —Cuestiono, comenzando a seguirnos.

—Su consejera estará algo indispuesta por el momento. Tenemos trabajo que hacer si pretendo dejarla presentable para su cita.

—¿Cita? ¿Cuál cita? —Me miró, esperando una explicación.