Takemichi edad: 16, 26.
Mikey edad: 17, 27.
Take altura: 1, 65.
Mikey altura: 1.58.
Dato: Esto no seguirá la linea del manga, sera un au, las personalidades de algunos personajes cambian, también me gustaría aclarar, me inspire un poco en la canción Pacify her, de Malanie Martinez.
Tema: Doncel.
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La sala quedo en silencio, el ruido que predominaba eran las manecillas del reloj, yendo tan lentamente que volvían loco al rubio, que, empezó a golpear levemente sus manos con esposas contra la mesa.
Empezó a tararear mientras movía un poco su cuerpo, viendo el vidrio negro, aunque el no podía ver hacia afuera sabían que lo estaban viendo y examinando su comportamiento.
El no era tan estúpido como para no darse cuenta de que lo iban a mandar a un psiquiatra, lo sabia, demonios que si.
Una mujer considerablemente mas alta que el, con corto cabello rojo, tanto como la sangre, y con unos profundos ojos azules, al ver sus ojos algo en su interior latió con fuerza, esos ojos parecían los de su pareja.
Pero la decepción llego tan pronto a el cuando vio que dentro de esos ojos no habían el tan conocido amor y cariño, solo una de intento de comprensión y seriedad.
–Manjiiro Hanagaki, 27 años, sabe por lo que esta aquí, verdad???.
El rubio inclino su cabeza mientra sonreía con alegría.
–Claro que lo se!!!, por asesinato.
Su tono de voz alegre le generaba un tétrico escalofrió a la psiquiatra, quien solo se mantuvo serena, analizando el comportamiento del contrario.
–Y déjeme decirle, que no me arrepiento, y creame que lo aria una y otra y otra vez, esa zor*a se lo merecía, nadie se mete con lo mio.
Sus ojos abandonaron todo brillo.
–Me gustaría que me cuentes, el por que de todo esto.
–Del porque mate a Hinata Tachibana???, por dios...se lo merecía, intento quitarme a mi esposo y quedarse con nuestro hijo, diciendo que ella los iba a amar mas que yo, estaba loca...y...solamente ocurrió.
La mujer suspiro un poco, sabia que el contrario estaba mintiendo, el asesinato estaba planeado, tenían todas las pruebas de que el estuvo planean dolo por lo menos desde hace dos años.
–Quiero que me cuentes, el porque todo esto sucedió, no el día de los echos, sino, desde el inicio.
El inclino su cabeza, pensando y recordando el pasado, sonrió y miro a la mujer, con la mirada brillando con amor y locura empezó a hablar, con un tono tan calmado que no concordaba con lo que había echo hace unas horas atrás.
–Fue un 12 de enero, era un día caluroso...
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Flash Back
Mikey chillo con molestia cuando el helado se le cayo al suelo, mientras sentía la risa de Draken sonar a sus espaldas, se giro molesto y empezó a darle patadas, no lo suficientemente fuerte como para lastimar lo, sino para tirarle su helado.
