The Loki's Toy [Loki y tú] (+18) [TERMINADA] ✓

Los celos de Loki

Por la mañana siguiente, los primeros rayos del sol atravesaron las cortinas de seda de la nueva habitación de ______. La poca luz que entraba fue más que suficiente para hacerla despertar incómoda.

Abrió los ojos con lentitud y aún adormilada hasta incorporarse en la cama tratando de despertar por completo pero seguía sintiéndose aturdida. Los toquidos en la puerta retumbaron en su cabeza a lo que cerró los ojos un momento antes de sobar el puente de su nariz.

—Adelante —permitió que entraran a la habitación.

La puerta se abrió y entró una mujer, regordeta y con cabellos rubios algo bajita y con la piel ligeramente tostada que denotaba su labor en el exterior del palacio.

—Lady Sigyn, es tarde, ya debería estar vestida para bajar a desayunar, la reina Frigga la está esperando —comentó aquella mujer que tenía un tono de voz muy suave que era agradable al parecer de _____.

—Sí, sí, estaré lista en veinte minutos, lo prometo.

La mujer hizo un asentimiento de satisfacción y salió de aquella enorme habitación para dejar que _____ se preparara a su ritmo para salir en dirección al jardín.

Tal como la midgardiana prometió, trató de no tardar mucho para dirigirse al patio donde se suponía la esperaba Frigga.

En el patio, Frigga y Loki estaban sentados en la mesa, esperando a _____ para comenzar el desayuno. Tenían una de sus constantes pláticas aleatorias sobre cualquier tema que le viniera a la cabeza a alguno de los dos.

—No sé por qué debemos esperar que Sigyn llegue. Le das tantas atenciones y apenas si la conoces —reclamó Loki a Frigga—, no lo entiendo.

—Es como si te preguntara el motivo por el cuál abogaste para que se quedara —respondió calmadamente Frigga.

—Por lástima —concluyó Loki—, pero tú no eres el tipo de persona que siente lástima por nadie, madre.

Frigga guardó silencio por unos segundos ante la respuesta sin sentimientos por parte de su hijo, no porque la hubiera dejado sin palabras sino que le gustaba a propósito dejar ese aire de misterio en lo que decía y hacía.

—Bueno, creo que te falta ver un poco más allá de esa supuesta lástima, porque es una chica encantadora, deberías de ver los ánimos con los que habla de cualquier tema.

—La he oído madre, créeme, es insoportable, jamás se calla.

— ¿La consideras realmente insoportable? —preguntó Frigga.

— ¿A qué te refieres?

—Generalmente lo que nos desagrada de las personas son las cosas que todavía no solucionamos en nosotros.

—Eso es una estupidez, madre. ¿En serio quieres que me trague ese cuento? Siempre he pensado que la persona que dijo eso era un inadaptado que no aceptaba su realidad.

—O para una persona que miraba a todos como uno mismo.

—Pues qué pésima perspectiva, madre.

—Aún no pierdo la esperanza de que llegue alguien que te haga cambiar tu perspectiva, hijo.

—Sí, lo sé. Es una lástima que aún no pierdas la esperanza.

Aunque Loki sabía bien que cierta midgardiana ahora le estaba provocando cosas que aún no tenía el valor de admitir. Justo en ese momento, todo lo que pasaba por su cabeza era la hora en la que Sigyn llegara al patio para verla nuevamente pero sentía que estaba tardando una eternidad en salir. Nuevamente movió su pierna de manera frenética.