La Caza de Greekdale

El diario de Dale parte 2

Día 100:

He pedido por favor a uno de mis ciudadanos que fuera en busco de textos antiguos sobre la magia. Como si de una orden se tratase se fue a buscarlos.

En los libros antiguos puede haber la respuesta que ansió encontrar.

Día 110:

Todos los libros que he leído llegan a la misma conclusión. Todo contiene magia. La realidad en si contiene magia. Si consigo canalizar sus fragmentos puedo intentar conseguir que se materialicen. No es un camino fácil. Intentaré conseguirlo.

Día 150:

Mis estudios avanzan muy lentamente. Austin ha venido a verme. Se trata de uno de los vecinos  con los que he entrado una relación de amistad. Viene de visita y suele traerme libros de magia. Dice que hace mucho que no salgo de casa y que le gustaría verme más.

Día 180:

Poco a poco voy consiguiendo canalizar los fragmentos de la realidad. Empezé por uno muy sencillo: el agua. A partir de una gota de agua extraigo toda su magia alrededor de mi mano. No es suficiente. No aguanta el tiempo necesario.

Austin ha venido a verme. Dice que está enfadado de que no le veo. No tengo tiempo para la amistad.

Día 190:

Creo que he encontrado la forma de que la canalización de los fragmentos de magia aguanten. Los textos antiguos hablan de un círculo de magia arcana. Si consigo dibujarlo podría lograr cosas mayores. Esto es un triunfo.

Austin vino a mi casa otra vez. Dijo que me lamentaría de no verle. Que quizás dentro de poco no lo vería más.

No tengo tiempo para su amistad. El mes que viene por su cumpleaños ya le veré.

Día 200:

Austin ha muerto. Me lo ha comentado uno de los médicos de la ciudad. Estaba muy enfermo.  Ha sido culpa mia. Yo tenía magia. Pude haberlo curado. Pero mi afán por conseguir mis objetivos me han nublado.

Dejare apartados mis estudios mágicos un tiempo.

Esto no está bien.

Día 300:

Ayer cumplí años. Ayer fui a la plaza del pueblo a celebrarlo. Ayer fue cuando la vi.

Tan hermosa. Con ese pelo que me hechizó. Con esos ojos que me cautivaron.

Su nombre: Amari.

Día 305:

Hoy me he acercado cuatro centímetros más de lo habitual hacia ella.

Pronto será mía.

Día 307:

Hoy me he acercado cinco centímetros más. Pronto será mía.

Día 309:

Hoy le he rozado el codo. Dios mío qué belleza. Pronto será mía.

Día 315:

No me lo creo. Ayer nos dirigimos la palabra. Jamás había estado tan nervioso en mi vida. Estaba caminando cuando de repente salió corriendo de una de las calles y chocó contra mi hombro.

Me pidió disculpas y se fue corriendo.

Es el mejor día de mi vida.

Día 320:

Ha venido a mi casa. Cuando la he visto en la entrada le he cerrado la puerta de golpe.

No estaba preparado para este acto de valentía por su parte.

Día 321:

Hoy ha vuelto a venir. Amablemente le he dicho que no podía entrar. Por dios bendito. ¡No estamos casados aún!

Me ha dicho que era nueva en la ciudad y quería presentarse debidamente.

Día 340:

La he invitado a salir. No sé ni cómo lo he logrado. Mañana al anochecer para ver las estrellas en el campo.

Día 432:

Fue una noche maravillosa. Jamás había cortejado a alguien. Nos encontramos en la plaza y fuimos hasta un campo apartado. Nos tumbamos en el césped y admiramos la grandeza de las estrellas.

Día 450:

He pedido oficialmente que sea mi compañera y ha aceptado. Estoy muy feliz. Ella me hace feliz.

Día 500:

Le pediré que se case conmigo. Es la mujer más perfecta que puede existir y no dejaré que nadie me la arrebate.

Día 501:

Ha dicho que sí. Nos casaremos pronto en la plaza del pueblo. Todo el pueblo está festejando.

Yo no quepo en mi del gozo. Pronto será mi mujer.

Todo está yendo bien.