Max

82 15 0
                                    

-¿Quieres ir a tomar algo conmigo después de clases? - me preguntó Alex en medio del pasillo del instituto.

Parpadeé y le miré confundida. Habían pasado dos semanas desde el incidente con Levi. En estas dos semanas, Alex y Liv habían estado ahí apoyándome. Max lo hizo a su manera. Mis ánimos habían decaído pero ellos se encargaron de animarme.

-Eh si claro – respondí – ¿a la cafetería de aquí al lado?

Alex sonrió y asintió. Al fondo del pasillo pude ver a Liv y Max muy mal escondidos. Rodé los ojos y pase por su lado.

-Cuéntamelo todo – dijo Liv cogiéndome del brazo.

Le explique a Liv que Alex me había invitado a tomar algo con él luego.

-uh – dijo – le gustas.

-No le gusto – le dije.

-Si le gustas – dijeron Loki y Luca.

Fuimos al comedor por nuestra comida y nos sentamos a comer. Liv y yo comíamos juntas todos los días. Se había convertido en una gran amiga y a pesar de la amenaza del hospital era un sol de persona.

-Olivia – dijo una voz y nos giramos los dos. Era Lindy junto a sus amigas y su novio.

-¿Qué haces con esa perdedora? - preguntó – ven con nosotros. Somos mejores que esa escoria.

-¿Le pego? - pregunto Loki.

-Se escoger mis amigas gracias – dijo Liv – puta falsa – añadió en voz baja.

-No estoy segura de ello – dijo

-¿Tu no eres Lindy? - preguntó una voz y vimos a Max con Alex.

-Si – dijo sonriendo - ¿y tú eres?

-Oh – dijo Max con una sonrisa que no aseguraba nada bueno – yo no importo. Vengo de parte de mi amigo Lucas. Te dejaste el sujetador en su casa cuando te acostaste con él el otro día. Dice que vayas a buscarlo.

Todo el comedor se quedó callado y Oliver se ponía mas rojo por momentos.

-Como – dijo lleno de ira.

-Eso es mentira – dijo Lindy.

-Ah y de parte de Marcos – continuó Max – que te dejaste unas bragas. Unas rosas con corazoncitos blancos.

- HEMOS TERMINADO- gritó Oliver y salió de la cafetería.

-No cariño es mentira – dijo ella saliendo detrás de él.

-EH LINDY – grité y esta me miró – se te ha caído algo.

Lindy confundida miraba a todas partes.

-Tu dignidad – acabé

Toda la cafetería empezó a reírse y esta se fue llorando. Nosotros cuatro nos empezamos a reír.

-Max – dije – te amo.

-Lo se, lo se – dijo – soy mas que una cara bonita.

En ese momento el móvil de Max sonó y este se puso sombrío.

-¿Que ha pasado? - preguntó Liv – y no digas que nada porque se nota de lejos que algo pasa.

-Es mi padre – dijo simplemente – esta enfermo de cáncer y lo han vuelto a ingresar. Todavía no tiene fecha para operarse por lo que el tiempo corre en su contra.

Nos quedamos callados todos. Nadie sabía eso de Max. Max nunca hablaba de si mismo. Recordé entonces lo que le dijo Ruby: solo tienes miedo. ¿Miedo? ¿A perder a alguien?

-Lo sentimos – dijo Liv -¿Y tu madre?

-No tengo madre – dijo Max – nos abandonó cuando tenía pocos años. Se fue con un tío que tenía el doble de dinero.

En ese momento me levanté y fui a abrazarle. Este al principio se tensó pero luego me correspondió al abrazo. Segundos después Alex y Liv se unieron.

-Awww que bonito – dijo Aqua.

-Con vuestro permiso os saco una foto – dijo Loki.

-Disculpad – dijo una voz – no es por molestar pero... estáis en plena caza.

Levanté la cabeza y vi a Ana y a Levi al fondo del comedor. Ana estaba con su cara de "déjame en paz", normal en ella. El día que no la ponga me preocuparé. Levi sin embargo se notaba triste. Tenía los nudillos ensangrentados y un moratón enorme en su brazo.

-¿Y a ti que cojones te ha pasado? -le preguntó Alex.

-Raphael – dijo Ana simplemente.

-¿Ese cabrón te pega? - preguntó Max.

-Ni os interesa ni os incumbe – respondió Levi fríamente – ahora hagamos nuestro trabajo -dijo y salió del comedor.

-Ana espera – le dije antes de que saliera también - ¿Es cierto?

-No lo sé – dijo – nunca me cuenta sus entrenamientos con él pero esta tan loco que lo veo capaz. Muchas veces nos entrena a tal forma que acabamos sangrando y con moretones por lo que no se decirte.

-Si de verdad te importa – dije abriendo la puerta del comedor – cuida de él.

Salí al pasillo con todos los demás detrás de mi. Caminé por el pasillo central del instituto hasta que vi a Levi apoyado en una columna. Ruby salió de la nada y saltó a mis brazos.

-No quiero estar con él – dijo en mis brazos – no se que le han echo.

-Ruby aléjate de ella – dijo Levi.

-Oye no eres nadie para hablarle así – le espeté.

- Cállate – me dijo – ni me hables. Tu no eres su dueña sino yo – dijo e intentó coger a Ruby de mis brazos. Esta le mordió la mano – AUCH – gritó y se apartó.

-Por gilipollas – dijo Ana.

-¿Tu de parte de quién estas? - preguntó Levi.

-Cuando acabéis – dijo Liv al lado de la puerta -podéis venir a ver esto – dijo y abrió la puerta.

Nos acercamos todos a ella y miramos por la puerta. La entrada del instituto, con sus aparcamientos y sus farolas, habían sido sustituidos por un alto y frondoso bosque. Árboles tan altos que apenas dejaban entrar luz, se encontraban enfrente nuestro. El suelo se había convertido en tierra con raíces de los arboles.

-Oh mierda – dije - ¿Quién ha abierto el Jumanji?

La Caza de GreekdaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora