Five
Estoy aquí, mirando a Dagmar con los ojos llorosos, tuve una pelea bastante grande con Anna luego de encontrarla con otro hombre en la cama, no me molesta pero por lo menos tendría que haber cerrado la puerta con llave.
Me enoje tanto que salí corriendo de allí y empecé a llorar de rabia, mi esposa me es infiel y no me molesta pero sigue siendo mi esposa y se que no puedo divorciarme de ella, después de todo, esto fue planeado.
-¿Puedo sentarme contigo?
-claro..-Su voz era fría pero dulce a la vez, avance y tome asiento justo a su lado, la mire a los ojos y sonreí nuevamente, pasó tiempo, mucho tiempo desde que estuve tan cerca de ella.- ¿por qué lloras?
-Anna estaba con otro hombre..
Sus ojos se abrieron y su mano acarició mi hombro, su toque fue tan maravilloso que me relaja de inmediato.
-lo lamento..
-Tu no tienes la culpa, niña bonita..
-No me digas así…
-lo lamento.
Deje de mirarla y empecé a jugar con mis dedos, estaba intentando controlar mis ganas de abrirle las piernas y meter mi lengua en su coño haciéndola retorcerse, meter mis dedos en su agujero y chupar sus duros pezones mientras la ahorcó con mi cinturón o mi mano, la extraño mucho y me esta torturando, me muevo incomodo ya que mis pensamientos sucios han hecho que mi pene se endurezca.
-Five ¿Pasa algo? Pareces incómodo..
Si Dagmar, pasa que estoy sediento de ti y quiero follarte hasta dejarte coja por una semana..
Tengo tantas ganas de tirarme sobre ella y devorar sus labios y hacerla gemir cuando mis dientes atrapen su labio inferior pero me detengo y respondo fríamente...
-Nada, no me pasa nada.
-Oh, está bien.
-Dagmar..
-Five..-dijo sin mirarme, en cambio miraba su libro.
-te extrañe, es bueno verte y saber que estás bien.- no dijo nada, solo me miró asintiendo.
-digo lo mismo. ¿Hace cuanto te casaste?
-Me case después de navidad, no miento si te digo que, iba a escaparme para buscarte…
Y es cierto, iba a escapar de mis obligaciones para buscarla pero cuando iba a hacerlo mi tío entró al lugar.
-Me fui con mis padres, te espere..
-¿Qué?
-Si Five, te espere porque pensé que vendrías a buscarme..
-Dagmar..
-Five, yo..
La miró fijamente a esos ojos que me vuelven loco, esos orbes que me tienen encadenado a ella, mi mano acaricio su mejilla y sus ojos se cerraron por unos segundos ante mi toque.
-Dilo Dagmar…
-Yo aún…
Un golpe.
-¡Five!
En ese instante no quería voltear, no quería ver a la persona que gritó mi nombre, era ella, mi esposa.
-¿Qué mierda haces aquí?
Dije alejando mi cuerpo de Dagmar y levantando mi cuerpo del sillón para acto seguido mirar a la zorra de Anna, mi niña bonita se puso de pie y apretó su libro contra su pecho mientras miraba a mi esposa con miedo.
-La pregunta es ¿Qué haces tan cerca de ella?.-dijo mirando a Dagmar amenazante.
-Eso no te incumbe, aparte no estas en jodida posición de hacer preguntas como esa, ¿acaso olvidas lo de esta tarde Chantel?
-Five no hablemos esto delante de ella, es insignificante..
Se acercó a mí y yo puse mi brazo cubriendo a Dagmar, protegiéndola de esta imbécil que es capaz de lanzarse sobre ella y golpearla.
Pasaste una línea muy grave Anna, no debiste decirle insignificante a Dagmar.
-Escuchame Chantel, que sea la última vez que le dices algo así a Dagmar, ella es mucho más que tú y que cualquier otra mujer…
Dagmar
Iba a decirle, iba a decir todo lo que siento pero su esposa llegó y empezaron a gritarse, Anna dijo algo que sinceramente dolió pero Five me defendió y fue ese acto tan insignificante el cual calentó mi corazón.
Su brazo estaba por delante de mi cuerpo, protegiéndome.
Apreté el libro contra mi pecho mientras Anna me lanzaba una mirada asesina.
-Five cariño, hablemos esto, yo no quise, él me obligó.
Uhhh si como no.
Pensé, lo miró con ojos de cordero pero él solo rió entre dientes, me puse tensa, esto era una pelea entre una pareja y yo aquí como un estorbo pero, no iba a dejar a Five solo.
-¡Chantel! Deja de mentir, nadie te cree eso, ni tú misma crees que él te obligó..
-Es que tu… ¡Carajo!
Enfurecida salió del lugar dejándonos solos nuevamente. Voltee hacia la joven que tenía detrás y acaricie su mejilla.
-Lamento eso Dagmar.
-Esta bien, Five.-dije en un tono tranquilizador, sonreí y ambos nos sumimos en un silencio, estábamos cerca, muy cerca, nuestras narices se rozan y su mano izquierda vuela hacia mi cintura, la cual aprieta y por un segundo cierro los ojos, mis labios se separan y suspiro nerviosa, su pulgar se acerca a mi boca y acaricia mis labios con este, tira de mi labio inferior hacia abajo y este rebota cuando lo suelta.- Five..
-Dagmar, yo…
-¡¿Qué pasa aquí?!
Marina que oportuna.
Me separo rápidamente de Five y sus mejillas están teñidas de rosa, se que yo estoy igual.
-Nada mamá, sólo Anna que hizo un escándalo…
-¿Qué hizo ahora?
-Mañana te contaré, me quedaré a dormir aquí…
Ella asintió y me miró, me sonrió y luego se fue..
-Yo-yo debo irme a preparar la cena, le prometí a Elisa que ayudaría..-dije nerviosa.
-Si, está bien, nos vemos en la cena…
dejo mi libro en la mesa y salgo jugueteando con mis dedos, estoy nerviosa y tengo miedo de tropezar.
-Dagmar...
Five
¡Vamos grandisimo idiota! Dile que la amas....
Pensé.
Ella volteó a mirarme pero las palabras simplemente no salieron, negué con mi cabeza y ella asintió avanzando, antes de cerrar la puerta ella volvió a mirar mis ojos, estaba nervioso, muy nervioso.
-Five..
-Dagmar..
No entiendo porque siempre que nos alejamos nos despedimos así, es raro pero hermoso, escucharla decir mi nombre me hace estremecer.
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adicción (Five)
Romance-Esto se ha vuelto una adicción, follarte es mi adicción. él necesitaba una sumisa y parecia ser Dagmar la indicada pero habia algo que Five no sabia, ella es virgen. el famoso Five Vega, un hombre millonario gracias a los negocios ilegales y sadic...